𝐋𝐔𝐂𝐈𝐃 𝐃𝐑𝐄𝐀𝐌𝐒 || 𝐒𝐭𝐫𝐚𝐧𝐠𝐞𝐫 𝐓𝐡𝐢𝐧𝐠𝐬 ||

||𝐋𝐃: 𝐋𝐮𝐜𝐞𝐬 𝐝𝐞 𝐧𝐚𝐯𝐢𝐝𝐚𝐝.||

Al día siguiente, Mackenzie despertó en la antigua habitación de su madre en casa de su abuelo. Ella sintió un acogedor aroma a panqueques y canela. Mackenzie se levantó del sofá y caminó a la cocina en dónde su abuelo estaba usando un mandil de cocina y su nariz aguileña estaba manchada con harina.

— ¿Abuelo? —Mackenzie dijo con una pequeña sonrisa. No sabía que su abuelo tenía dotes culinarios — No sabía que cocinabas.

Alan sonrió levemente y siguió cocinando los panqueques.

— Desde que tu abuela falleció debí aprender unas cuantas cosas, entre ellas cocinar.

— Mmm... Vaya que es cierto lo que dice mamá, de todo lo malo sale algo bueno —Mackenzie dijo mientras se sentaba en una silla.

— Yo le enseñe ese refrán cuando ella tenía tu edad más o menos —Alan dijo y puso unos cuantos panqueques en un plato para dárselos a su nieta — ¿Sabes? Cuando tu mamá tenía tu edad ella solía ir con Hopper a meterse en todo tipo de líos.

— ¿Mi mamá? ¿Metiéndose en problemas? ¿Con Hopper? —La menor de los Byers no podía creerlo. Su madre era la persona menos problemática que había conocido en su vida. Además, era un poco irónico pensar que Hopper se había metido en todo tipo problemas siendo que ahora era la persona que evitaba los problemas.

Mackenzie solo carcajeó suavemente antes de empezar a comer sus panqueques.

— Ah sí. Joyce me llamó diciendo que Karen te pasará a recoger a las diez —Alan mencionó dejando a su nieta un tanto confundida.

— ¿Karen? ¿Karen Wheeler? ¿La mamá de Michael Wheeler? —Mackenzie ladeó su cabeza mientras masticaba su comida.

— ¿Conoces a otra Karen que sea cercana de algún modo a tu familia?.

— Touché... —Mackenzie murmuró sacándole una carcajada a su abuelo.

— ¿Si quiera sabes que significa esa palabra? —Alan apagó la cocina mientras volteaba para ver a Mackenzie quien negó con su cabeza — Significa que le diste en el blanco.

Mackenzie sonrió levemente anotando mentalmente la nueva información que su abuelo le había otorgado.

[ ... ]

Mientras tanto en la residencia Wheeler los cuatro chicos y Once estaban en el sótano de la casa. La chica estaba cómodamente en el sofá mientras jugaba con el walkie–talkie de Mike. Los cuatro chicos estaban al rededor de la mesa escuchando al chico Wheeler.

— Escuchen, diremos que tenemos el club audiovisual esta tarde, eso nos dará tiempo para ir al bosque y buscar a Will —Michael dijo.

— ¿Qué hay de mi? —Louis cuestionó — Yo no estoy en su escuela y mucho menos estoy en un club audiovisual.

— Cierto... —Mike llevó una de sus manos a su barbilla — ¡Ya sé! ¿Si dices que pasarás la tarde en casa de Mackenzie?.

— Negativo —El menor negó con su cabeza — Mi madre llamará de inmediato a la casa Byers para confirmar que yo iré.

— ¿No hay algo que usualmente hagas en las tardes fuera de casa? —Lucas le preguntó.

— A veces voy a la biblioteca a estudiar para los exámenes —Louis dijo sin mucho problema.

— Entonces dile a tu madre que irás a la biblioteca a estudiar y ya —Mike dijo y Louis asintió — Igual, dile que después de estudiar vendrás a cenar aquí. Dudo que no lleguemos para la hora de la cena.

Lucas miró de reojo a Once y no pudo evitar pero volver a plantearle a Mike la misma pregunta por quinta vez.

— ¿De verdad crees que la rara sabe en dónde está Will?.