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Al día siguiente Jungkook estaba con Seungkwan en el suelo, comiendo galletas, leche y otros postres mientras pintaban con acuarelas hermosas que Taehyung le había regalado a Jungkook. La noche anterior no había dormido bien después de tomar el habitual té para prevenir las panzas gordas. Los pensamientos tristes y las lágrimas silenciosas se apoderaron de él. Cuando despertó se preparó para irse al orfanato, pero Taehyung se negó rotundamente a que saliera solo porque era peligroso. Tampoco lo quería rodeado de guardias porque decía que no era el momento adecuado para que todos supieran que el Rey tenía un Omega y no era correcto que este anduviera por ahí sin él. Todas las excusas parecieron ridículas para el Omega y Taehyung no tuvo más remedio que enviar a buscar al niño Seungkwan por petición de Jungkook.

A Taehyung le parecía una idea terrible, pero la ansiedad pareció desaparecer de Jungkook una vez que el niño corrió hacia él y no sabía si aliviarse o preocuparse más.

-¿Y si pintamos flores?-Preguntó el niño mirando a Jungkook con una sonrisa.

El Omega acarició su cabello suave y le devolvió la sonrisa.

-Pintaremos lo que quieras.

Jungkook lo miró tomar otro cuadro en blanco y comenzar a dejar manchas rojas y amarillas sin sentido. Le daba cierta paz compartir con Seungkwan, le daba un momento feliz y al mismo tiempo se sentía sereno. Pero no completo. Bajó la mirada a su propia pintura de una cuna y sintió el revoloteó de sus mariposas a su alrededor.

-¿Puedo tener más leche?-Preguntó el niño mirando su vaso vacío.

-Claro que si.-Jungkook le sirvió más y alguien tocó la puerta.-Adelante.

La puerta se abrió y dejó ver a una princesa que amargó por completo el momento de Jungkook. Vestía un vestido rosa bastante ligero, y su cabello estaba suelto y liso. En sus manos llevaba un cofre pequeño y sus labios pintaron una sonrisa suave.

-Hola.

-¿Qué haces aquí? Creí que ya te irías.

-Después de hablar contigo.

-No tengo nada que hablar contigo.-Jungkook la miró caminar hasta él y sentarse en la cama sin su permiso.

-¿De quién es él?-Preguntó ella.-Parece bastante pobre.

-Seungkwan, ¿Por qué no buscas a Jiyook y le dices que te lleve de vuelta?-Jungkook le tendió una de sus pinturas secas.-Llévate está.

-Está bien.-El niño asintió con cierta tristeza, pero se fué corriendo cerrando la puerta tras él.

Jungkook se levantó y enfrentó a la Omega con los brazos cruzados.

-No puedes entrar a mi habitación y creer que puedes tratar mal a mi verdadero invitado.

-¿Te gusta jugar con niños sin mamá?-Jennie casi sonríe.-¿Te gusta jugar a la mamá?

Jungkook apretó los puños a punto de golpearla, pero su voz lo detuvo.

-¿Por qué no tienes a tu propio bebé?

Jungkook tragó duro:-No estoy casado aún.

-Bueno, eso me da ventaja.

-Taehyung no te quiere.-Le recordó él.-Y te exijo que te vayas si...

-Ventaja sobre tí.

Jungkook no pudo disimular su confusión.

-¿Sobre mi?

-Vine a buscar un trato.

-Lo mínimo que deberías hacer es pedirme disculpas.

REIGN: Destino | Taekook | #2 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora