PALETTE OF EMOTIONS; Kuroo Tetsurou

iii. lev haiba

❙❙ iii. Lev Haiba ❙❙

Pasaron algunos dias desde la reunión con el equipo, el ritmo de vida de Inari habia cambiado notablemente. Antes, ella solía salir con sus amigas cada vez que tenia oportunidad, pero ahora la mayoria de sus dias se encontraban ocupados gracias a sus responsabilidades con el equipo de Nekoma.

Inari se encontraba en su hora de descanso, después de una mañana agotadora de clases, podría aprovechar su tiempo para conversar con su amiga Yasu. Ella tenia el cabello corto y ligeramente ondulado, sus ojos eran de color marrones y tenia una mirada soñadora que reflejaba su gran imaginacion.

—¿Y como has estado Yasu?—preguntó Inari, interesada en ponerse al dia con su amiga.

—Oh, como siempre —respondió dando un suspiro, mientras juguetaba con un mechon de su cabello—. ¿Recuerdas del concurso de escritura del que te comenté la otra vez?

—¡Claro que lo recuerdo! ¿Participaste en el concurso? —pregunto con curiosidad, sabiendo que Yasu tenia un talento para la escritura.

—Si, decidí darle una oportunidad asi que presente uno de mis relatos cortos —respondió con una ligera sonrisa—, no sé si sera lo suficientemente bueno como para ganar, pero al menos me diverti haciendolo.

—¡Eso es genial! Seguro que si ganas, tienes un gran un talento para escribir. —Inari la codeo en forma de apoyo.

—Eso espero—Yasu hizo una pausa, desviando la mirada hacia la dirección de la puerta con un gesto de confusión—. Oye, inari creo que hay un chico que te esta buscando. No para de hacer señas extrañas. —dijo mientras señalaba sutilmente hacia la puerta del pasillo.

Inari siguió la mirada de Yasu hacia la puerta del pasillo, donde un chico de cabello oscuro agitaba la mano con insistencia, era Kuroo. Frunciendo ligeramente el ceño por la confusión, se levantó del asiento y se dirigió hacia la puerta, preguntándose por qué habia venido a buscarla.

—Hola Kuroo, ¿Que te trae por acá? —preguntó con curiosidad.

—Venia a verte, por supuesto. —respondió con una sonrisa juguetona, agitando su mano.

—Oh, ¿de verdad? ¿Sucede algo importante? —cuestionó Inari, tratando de leer la expresión en el rostro de Kuroo.

Kuroo dejó escapar una risa suave y asintió.

—Bueno, no diría que es algo extremadamente importante —empezó a hablar mientras apoyaba su brazo en la pared detrás de Inari—, pero venia a avisarte que el entrenador nos pidió que todos fueramos temprano a la cancha. Dijo que tenia un aviso que darnos.

—Gracias por avisarme Kuroo, ire cuando terminen las clases.

Inari se despidió de Kuroo con la mano y regreso a su asiento donde su amiga la estaba esperando con una mirada extraña.