Kakashi queda herido durante una misión y Rin lo cura con su ninjutsu médico. Mientras esto sucede, Kakashi se va dando cuenta de que le gusta mucho sentir las manos de Rin tocando su cara. Esto desata más sensaciones que Kakashi nunca antes había e...
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-¡Kakashi! -gritó Rin desde lejos, mientras corría hacia su compañero, que trataba de levantarse del suelo con dificultad.
Kakashi había recibido varios golpes en la cara, los cuáles le habían hecho perder el equilibrio y caer al suelo, dejando indefenso el pergamino que el equipo 7 debía proteger, ya que contenía información confidencial que debían transportar a Konoha. Los ninjas enemigos aprovecharon la caída de Kakashi para tomar el pergamino y desaparecer hacia el horizonte con él. A pesar de los golpes, el dolor más grande que el pequeño ninja de cabello plateado sentía, era haber fallado en su empresa de proteger el pergamino. Se sentía avergonzado de su falla, por lo tanto, intentaba levantarse lo más rápido posible para ir en busca de los ninjas enemigos y corregir su error.
-¡Rin, revisa y cura a Kakashi mientras Obito y yo recuperamos el pergamino! -ordenó Minato sensei, mientras tomaba a Obito para poder transportarse usando su hiraishin. -¡Kakashi, queda prohibido que nos sigas hasta que Rin haya terminado de curarte! -alcanzó a gritar mientras desaparecía. Minato conocía a su estudiante, y sabía que era capaz de seguirlos, ya que su perfeccionismo no le permitiría dejar una misión en manos de nadie más, mucho menos en manos de su compañero Obito, a quién consideraba el menos hábil del equipo.
Rin se sentó en el suelo junto a su compañero, que aún intentaba levantarse, y se dispuso a calmarlo.
-Ya escuchaste a Minato sensei, él y Obito se encargarán de todo. No te levantes y déjame ver tu cara. -dijo ella mientras ponía las manos sobre los hombros de Kakashi, intentando evitar que este se moviera demasiado.
-No me pasó nada, no necesito que me revises. Ahora suéltame y déjame ir tras ellos. -discutió Kakashi, aun un poco desorientado por los golpes en la cara que había recibido. No entendía cómo no había logrado bloquear los ataques de sus agresores, y seguía dispuesto a ir tras ellos para limpiar su reputación.
-¡Kakashi! No pensarás desobedecer la orden que nos dio Minato sensei, ¿verdad? Además, se transportaron usando el hiraishin, por más que intentes seguirlos, ya deben estar muy fuera de nuestro alcance. ¡Deja de insistir y quédate quieto para que pueda revisarte! -lo reprendió Rin, aun con las manos en sus hombros, impidiendo que este se levante.
Kakashi todavía tenía el orgullo herido por haber dejado que le encajaran golpes en la cara, y fallar a su cometido de proteger el pergamino, sin embargo, Rin tenía razón. Minato sensei había dado una orden, y Kakashi se tomaba éstas muy en serio. El pequeño ninja tenía la madurez suficiente para entender que, si el líder del equipo da una orden, lo hace para poder llevar a cabo la misión de manera más eficiente, y todo aquel que desobedezca esa orden, estará entorpeciendo dicho proceso. Por lo tanto, a pesar de la humillación que esto implicaba para él, dejó de insistir en seguir a Minato sensei y a Obito, para quedarse quieto y dejar que Rin lo revisara.
-Voy a tener que bajarte la máscara para revisarte bien. Por favor, no te muevas.-le advirtió Rin, ya que sabía que eso no le agradaba a Kakashi del todo. No era la primera vez que lo hacía, pero sabía que debía hacerlo con cautela, ya que el olfato de Kakashi era muy sensible y usaba la máscara para disminuir la intensidad de su olfato. Si se la quitaba con brusquedad, podía desorientarlo aún más de lo que ya lo habían desorientado los golpes en la cara.
