Uno

16 3 0
                                    



Gyehyeon era un Omega que había nacido con un destino fatal.



Desde su concepción los señalamientos fueron su primera bienvenida al mundo.



Era un cachorro bastardo, proveniente de la aventura entre un sirviente y un amo del cual todo el mundo parecía estar enterado a la perfección.


Durante su corta infancia había vivido en casa de los amos, ignorando ese detalle tan importante, pues era hijo de los amos y nadie se atrevía a hablar frente a GyeHyeon, no hasta que un día tuvo que abandonar la casa sin explicaciones junto a uno de los fieles servidores de la familia.



Quiero regresar a casa se quejaba un GyeHyeon de tan sólo seis años sobre la carreta que el servil empujaba durante varios días de viaje Esto es aburrido… Tengo hambre.


Sólo esa última frase hizo detener al hombre y rebuscar entre sus bolsas, para después correr y extender una bolsita entre las manos.


Aquí tienes.


GyeHyeon toma la bolsita y dentro de ella descubre unos granos de maíz cocidos.


No quiero esto avienta los granos al piso y mira retadoramente al jóven hombre que le acompaña en el viaje.



Un hombre que no lucía muy viejo, ni muy joven. De cabellos dorados y mirada amable, nada robusto y con una dulce voz. Esa persona cuidaba de GyeHyeon y sus hermanos desde que nacieron. Trataba a los cuatro hijos de los amos con mucho cariño y paciencia, los quería como a sus propios hijos y GyeHyeon lo sabía, pero también sabía que sólo era un simple servidor de sus padres y que podía tratarlo como quería, para recordarle su lugar.


¡Gyehyeon!


Ese grito no había sonado tan fuerte y la mirada de aquel hombre no mostraba molestia, como las de los ejemplares Alfas.


Quiero comida de verdad. De mi casa.


GyeHyeon no esperaba ningún regaño de su parte, ni alguna reprimenda por su actuar, sólo quería regresar a su antiguo hogar y continuar con su cómoda vida, pero eso no iba a suceder y lo supo en cuanto su padre le miró con pena y se acercó hasta sostener sus pequeñas manos.


Ya no podemos regresar a casa, cariño acaricia suavemente los dorsos de las manos de GyeHyeon Recuerda que este es un viaje para que tú encuentres el nuevo camino de tu vida suelta una mano y acomoda un mechón de cabellos detrás de la oreja del niño Es una obligación que todo ser debe cumplir para crecer y madurar. Sólo después de eso, podrás regresar a casa de tus padres y demostrarles cuánto has crecido, pero ya no podrás volver a vivir con ellos… sólo puedes visitarlos… A menos que te hereden su casa.


¿No podía llevarme mi papá? ¿Por qué debo ir con usted?


Porque tus padres deben cuidar el reino que tus abuelos les entregaron y yo, como tu cuidador soy el más apto para guiarte con responsabilidad.


¿Hasta cuándo?


Hasta que puedas sobrevivir por tí mismo.



GyeHyeon inclina la cabeza a un lado con muchas dudas.


Si usted me guiará hasta entonces, ¿Quién guiará a mis hermanos, HoYoung?


ÁMAMEWhere stories live. Discover now