N̷o̷t̷e̷s̷ ̷F̷r̷o̷m̷ ̷T̷h̷e̷ ̷B̷r̷o̷k̷e̷n̷ ̷B̷o̷y̷ [𝙅𝘼𝙆𝙀𝙒𝙊𝙉]

- OO7

— ¡Solo vete!— dijo.
Jungwon lo empujó con fuerza con su otra mano, y perdió el equilibrio, y sin recordar que su mano la sostenía HeeSeung, cayó junto a él, y en un rápido movimiento, su cuerpo estaba debajo del otro,  HeeSeung ahora tenía una mano debajo de su cabeza y la otra la tenía rodeada a su cintura.
Se miraron uno al otro, Jungwon se sonrojó y HeeSeung le sonrió.

Justo en ese momento, escucharon el flash de una cámara, Jungwon con los ojos abiertos giró hacia su puerta, HeeSeung lo imitó.. Ahí estaba Sunoo, con la misma reacción que ellos y con su teléfono en el pecho.

— L-lo siento, ¡sigan con lo suyo!— corrió después de decir eso con rapidez. HeeSeung corrió tras de él, Jungwon se quedó en su habitación, echado en el frío piso, sonrojado y perplejo completamente.

Después de correr por el pasillo, HeeSeung lo alcanzó y cogió la mano de Sunoo, en la que tenía el teléfono, y lo forzó a detenerse.

— ¿Qué mierda estás tratando de hacer ahora?
— ¿Yo? Nada.— sonrió radiante.— Solo quiero que Jungwon pierda todo y esta es la prueba para destruirlo completamente.— lo miró con una mueca— Ey, no te preocupes, no serás descubierto.— sonrió aún más.

— Estás loco, Kim Sunoo.

— Sí, sí, lo que digas. Pero loco por recuperar todo lo que me robaron.
Y con eso, Sunoo se soltó y caminó por el pasillo.

— Escúchame, comparte esta foto y colócala en el mural y en el foro del instituto, pero censura la cara de HeeSeung, si no lo haces, date por muerto.
— S-si señor. Lo verá el día de mañana, lunes.
— Buen chico, es tiempo de que me de todo lo que siempre ha sido mío, mañana será el último día de reinado de Jungwon.

Jungwon caminó dentro del instituto, esa mañana Sunoo estaba muy bien con él, fue muy terrorífico de ver, pero estaba convencido de que tal vez por sus cartas, había tomado un poquito de conciencia...
Con cada paso que daba, los estudiantes hablaban entre ellos a susurros, miró a todos, muy confundido. De repente, alguien lo empujó y cayó sin poder hacer algo.

Sunoo lo ayudó, muy preocupado.
— ¿Estás bien?— suspiró.
— Sí, puedo hacerlo. Solo ve con tus amigos.
— Bueno.. si tú lo dices..

Y pensó que todos dejarían de cuchichear, pero nadie lo hizo.

Divisó a Félix, corriendo hacia él.
Respiró con pesadez y dijo:— ¿Escuchaste lo que está diciendo de ti?

En ese momento, entendió todo.
Miró a su alrededor que todos lo veían con una mala cara, entró en desesperación, pero él no hizo nada malo... ¿o sí? 

— Jungwon, ven conmigo.
Félix tomó su brazo y caminó con rapidez hacia algún lugar, hasta que se detuvo de golpe. 
— Ellos hicieron una mala jugada.