"¡No hay necesidad hacer eso!" Fluttershy gritó en defensa de Shortround.

Discord se volvió hacia la yegua, con los ojos muy abiertos por la sorpresa ante el tono de su voz. ¿Quién se creía que ella era? ELLA ERA SU PRISIONERA! ELLA NO TENIA DERECHO A-

Un estallido de dolor atravesó su pecho y se encontró colapsando contra las lujosas almohadas persas en su cama. "¿Ves? ¡Necesitas calmarte o vas a empeorar las cosas!" La regañó Fluttershy, frotando suavemente el vendaje que comenzaba a sangrar de nuevo. "Shortround, encuentra a Rarity y dile que necesito vendajes nuevos". El enano asintió con la cabeza y rápidamente salió de la habitación arrastrando los pies.

Discord hizo una mueca de dolor y movió su pata a su pecho. "¿Q-qué... q-qué me ha pasado?"

Fluttershy se mordió el labio y gentilmente llevó un paño húmedo y fresco al pecho de Discord para limpiar la sangre. "¿No te acuerdas?"

Discord gruñó su frustración. "Si lo hiciera, ¿crees que te estaría haciendo esa pregunta?" ladró, antes de sisear cuando el dolor volvió a barrer su pecho. "¡Yo… te recuerdo huyendo!" gimió.

Fluttershy ignoró su sarcasmo. "Te dispararon-"

"¿Qué?" Discord miró a Fluttershy con incredulidad. ¡No recordaba haber recibido un disparo! ¿Cuando pasó eso? Y luego... lentamente, como las ondas en una piscina, los recuerdos volvieron a él. Los ponis con los que luchó en el callejón, y el burro, Cranky Doodle. Tenía a la yegua por los pelos, amenazando con matarla. Tenía una pistola, y Discord recordó "quitarle" la pistola a Doodle de la única forma que sabía. Pero todo después de eso... fue oscuridad.

"Él... él trató de matarte", explicó Fluttershy, frotando suavemente la herida. "De hecho casi lo hace.. por poco".

Discord gimió mientras limpiaba la sangre. "Me parece que estaba justo en el blanco".

"Eres muy afortunado", susurró Fluttershy. "La bala no le dio en los pulmones ni en el corazón".

"Bravo por mí", murmuró. "Quizás no fue suerte... Tal vez fue simplemente el hecho de que Doodle era un tirador muy malo, ¡AHHH!" rugió mientras ella frotaba demasiado bruscamente su herida. "¿QUÉ DEMONIOS CREES QUE ESTÁS HACIENDO?"

Fluttershy saltó por el cambio de tono, sin embargo, sus sentimientos hacia el Fantasma habían cambiado desde que la tomó prisionera por primera vez. Oh, ella todavía lo despreciaba, eso no había cambiado, pero su miedo hacia él se había derretido, y ahora descubrió que él no era la criatura temible que pretendía ser, simplemente una criatura mimada que hacía grandes berrinches cuando no se salía con la suya, ya sea con la ópera en sí, o cualquier cosa. "Estoy tratando de ayudarte", le susurró ella, sintiendo que su paciencia se agotaba.

"¿Ayúdarme?" preguntó amenazadoramente. "No recuerdo haber pedido tu ayuda... ¡y más bien se siente como si estuvieras tratando de MATARME!" Se derrumbó contra las almohadas mientras el dolor abrasaba su cuerpo, respirando fuerte y rechinando los dientes.

"¡Tienes que quedarte quieto!" ella ordeno. "Ya rompiste los puntos anteriores, y nunca antes había cosido la carne, por lo que no son los más fuertes. Por favor, quédate quieto". Discord la observó a través de las rendijas estrechas cuando la vio preparar una aguja, quemando la punta en la llama de una vela antes de pasar el hilo por ella.

"Manten esa cosa lejos de mí", gruñó bajo y profundo.

Fluttershy hizo odios sordos a lo que el fantasma le dijo. "Quédate quieto; cuanto antes me dejes hacer esto, antes terminará y podré dejarte en paz".

Se movió para perforar el área de la herida, pero Discord no quiso saber nada de eso. Se estaba alejando de ella como un bebé que no quiere su medicina, y cuando finalmente pudo hacer contacto, él emitió un rugido cuando sintió que la aguja pinchaba su ya dolorosa herida. "¡QUITA TUS PEZUÑAS DE MÍ!"

Discord y el Fantasma de la Opera [Fluttercord]Onde histórias criam vida. Descubra agora