La seducción de la bestia

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Al día siguente, tras un largo vuelo, llegas en taxi a la granja de tus padres. Sales del coche y ves a tu madre corriendo hacia ti

Ma: Mi bebé

Yo: Mamá

Te da un fuerte abrazo y tú le devuelves el apretón

Ma: ¡Mírate! ¿Te han hecho modelo en esa agencia de moda?

Yo: Ya para, mamá

Pa: Miren quien es

Yo: Papá

Sonriendo alegremente, tu padre no tarda en acercarse a ti y envolvente en un fuerte abrazo

Pa: Necesito mostrarte algo

Con entusiasmo desenfrenado, tu papá te conduce hasta una de sus plantas de cannabis en maceta

Pa: Has llegado justo a tiempo para dar nombre a la nueva cepa

Ma: ¡Por el amor de Dios, Tan! La chica acaba de llegar

Pa: Seguro que le encantará. Vamos, cielo

Yo: Emm, bueno, se llamará Gloria Ardiente

Pa: Ese en bueno. Arde en tu camino a la gloria

Ma: ¿Estás hablando en serio, Tan?

No puedes evitar reírte, las dulces y familiares riñas de tus padres te hacen sentir como en casa

Yo: -se siente muy bien-

Ma: Vamos, hija. Llevemos tus cosas arriba

Sigues a tu madre hasta la casa, guardas las maletas. Estás sentada a la mesa de la cocina con tu madre mientras tu padre está fuera trabajando en el jardín. Te pone una taza de té caliente delante y se sienta

Ma: Aquí tienes, cariño

Yo: Gracias, mamá

Ma: ¿Cómo estuvo tu viaje?

Yo: Estuvo bien

Miras la taza. Queires ser sincera con tu madre, pero te cuesta expresar lo que piensas. Te aclaras la garganta

Yo: Mamá, tengo que decirte algo

Ma: Me imaginé que habría un motivo por el que pediste venir. ¿Qué pasa?

Yo: Renuncié a mi trabajo en Illusion

Ma: ¿Qué? Creí que te estaba yendo bien

Yo: Sí, pero las cosas se complicaron. Me involucré con mi jefe, Park Seonghwa. Y yo lo terminé porque asumí que él iba a hacerlo

Tu madre se queda en silencio por un momento, procesando lo que acabas de decirle. Luego se inclina sobre la mesa, con las cejas fruncidas en enojo y preocupación

Ma: ¿Quién es ese idiota y dónde puedo encontrarlo para enseñarle el dorso de mi mano?

Yo: ¡Mamá!

Ma: Bueno, ¿qué esperabas que dijera? Te costó tu trabajo

Yo: Yo decidí renunciar, mamá

Ma: Pero no lo hubieras hecho si no se hubieran involucrado, ¿verdad?