Franco: Estoy diciendo la verdad, acéptala.

Dante respira agitadamente, deseando fumar un cigarrillo para aliviar su estrés, pero decide preguntar: ¿Está muerta?

Franco: No, gracias al cielo, está viva. Pero en estado grave.

Dante: ¿Qué pasa?

La pausa hace que sus oídos se agudicen.

Franco: Ha sido atacada. Un intento de asesinato, una venganza de sus enemigos. Le dispararon a su coche, chocando a toda velocidad contra un poste, y resultó gravemente herida.

Dante: ¿Qué tan grave está?

Franco suspira roncamente y contesta: Los médicos dicen que los órganos reproductores están afectados... Tuvieron que hacerle una serie de operaciones y extirpar ambos ovarios.

Dante: Joder...

El mafioso aprieta los puños hasta que crujen y duelen.

Dante: Me lleva la chingada... por qué tenía que pasar esto justo ahora...

Franco: ¿Qué más pasó?

Dante: Tengo que confesarte algo. Hay una chica con la que tuve una aventura. Es solo una aventura temporal. Es una larga historia. El caso es que acabo de descubrir que está embarazada. El bebé es mío. Intentó ocultarme el embarazo, pero lo descubrí.

Franco: ¿Qué? ¿De verdad? ¡¿Embarazada?! ¿Quién? ¿Cómo se llama?

Dante contestó dando un fuerte suspiro: Andrea Luján...

Franco: Nunca he oído hablar de ella. En cualquier caso, debes casarte con Victoria, ¡aunque sea inválida! No podemos perder el contacto con los Salvatierra. Medio centenar de depositantes ya han invertido en nuestra nueva empresa y cada día se duplica el volumen de ingresos.

Dante piensa cómo su primo se atreve a decirle cómo vivir su vida.

Está tan molesto que está por colgar el auricular, pero comprende que su primo está preocupado por los intereses de la familia.

El mafioso se tranquiliza y dice: entiendo que estoy comprometido con ella, pero ahora nunca podrá darme un heredero.

Franco: ¡Es un problema, lo entiendo! Tal vez deberías considerar un sustituto...

De repente, Dante se da cuenta... como si un poder superior le hubiera enviado un indicio de
esperanza.

Qué oportuno... El propio destino insinuó que un niño concebido inadvertidamente en el vientre de una simple niña a la que él hizo mujer debía vivir.

Dante piensa: Lo aceptaré. ¡Como el primer y gran heredero de Santoro! Andrea dará a luz.
Si da a luz, lo acogeré bajo mi tutela y llevará con orgullo el apellido Santoro.

//////UNA HORA DESPUÉS//////

Dante: No habrá aborto. He cambiado de opinión. Vas a tener ¡A MI HIJO!

Andrea: ¡¿Qué?!

La rubia sacude la cabeza y piensa que debe estarlo imaginado. Dante quería deshacerse del bebé. Fue muy explícito al respecto.

7 noches con el mafiosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora