42: Las Secuelas

Magsimula sa umpisa
                                    

— No debegías levantarte tan rgapido de la cama, ¿que sucedió?—  su mirada preocupada paso por mi cara de seguro llena de cansancio e inflamada por las lágrimas—. ¿Que te hiciegon?

— Estoy bien. Nada permanente—  sacudí la cabeza, recordando la palabra Impura en el brazo de Hermione—. ¿Cómo están los demás?

— Monsieur Ollivander esta bastante frágil...— alze la cabeza curiosa al oír ese nombre, entonces Dobby primero tuvo que rescatar a ese hombre... también de seguro a Dean que estaba con los otros prisioneros. Al pensar en el elfo todo lo que me decía Fleur se volvió sonido de fondo, recordé como cayó en los brazos de Harry, sonriéndole una ultima vez a su primer amigo, a la primera persona que lo habia tratado como el ser tierno y gentil que era.

—  Dobby, él...— empecé esperando que lo ultimo que yo habia visto fuera uan terrible pesadilla debido a las torturas que Bellatrix me habia infligido, pero Fleur hizo una mueca y me vio con pena, no pudiendo negar la realidad, puso una mano en mi hombro;

— Lo siento, chérie.

Me tape la cara con las manos, Fleur me dio un gentil abrazo de hermana mayor como de esos que me daba Morgana cuando podia tocarme. Trate de controlar mis sollozos, mi respiración irregular y un sonido raro salió de mi garganta mientras lloraba en el hombro de la hermosa chica. Recordé a Dobby en segundo año queriendo matar a a Harry para "protegerlo", a cuando empezó a trabajar en Hogwarts y estuvo siempre a nuestro lado e incluso se ponía todos los ridículos gorros que Hermione tejía para los demás elfos. Mi mirada paso hacia la ventana donde pude reconocer a Harry quien estaba con una pala en sus manos, cavando lo que asumí era la tumba para nuestro pequeño amigo. Ni siquiera paraba un poco, simplemente cavaba y cavaba, sin detenerse, demasiado preocupado en sacar la tierra a oscuras. Fleur me miro esperanzada;

— No ha pargado de cavar. Debergias ig con él. Te escucha.

— No. Aun no. — sacudí la cabeza, se notaba que él necesitaba tiempo a solas, tal vez estaba ahogando todos sus pensamientos de culpa e ira en cavar esa tumba. Harry no era muy bueno en cuanto a controlar emociones o entender sentimientos—. Él necesita su espacio ahora.... y yo también. Tengo que ver a Hermione...

— Esta descansando, me temo que aun esta muy débil, Dean y Luna han prgeguntado pog ti... 

— ¡¿LUNA ESTA AQUI?!— Hice Fleur a un lado y rápidamente me puse en pie, debido a mi estado rápidamente me mareé, sintiendo que la sangre no me llegaba a la cabeza, em agarre a lo mas cercano que era Fleur, controlando mi visión y tratando de no caer inconsciente de nuevo.  Mis músculos ahora solo ardían pero no se sentían congelados por lo que podía caminar, aun así Fleur no me soltó. 

— ¿Estas bien?—  entrelazó su brazo con el mío—. ¿Quiegues que vayamos del brgazo?

— Me... me gustaría eso— balbuceé esbozando uan tímida sonrisa, aun podía recordar la cruel risa de Bellatrix mientras me retorcía en el suelo, recordándome una y otra vez que ella había asesinado a mi padre y también amenazándome con que iba a matar a Hermione y a Hermione diciéndole que me iba a matar a mi si no le decía la verdad de la espada. Toda esa crueldad, esa rudeza, ese frio, estaba siendo poco a poco reemplazado por la suavidad y la calidez de Fleur . Acepte su brazo, tratando de evitar los escalofríos y la sensación del maleficio en mi cuerpo mientras bajábamos hacia el primer piso de la casa, allí en el pequeño salón se hallaban Luna y Dean junto con Bill. Inmediatamente fui corriendo hacia mi amiga, se veía cansada y ojerosa aun así su cara se ilumino tanto como la mía cuando me vio;

— ¡Luna!— chillé abrazándola con fuerza, ella me abrazó de vuelta con una suave sonrisa antes de separarnos y vernos mejor la una la otra; aunque estaba aliviada de que no la hubieran asesinado aun así ella se veía afectada en su tiempo como prisionera.

Laila Scamander Y Las Reliquias De La MuerteTahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon