Cenizas del ayer

Capitulo 1. ¿Te amo?

Soy Mila, una adolescente de 16 años y estos días han sido muy complicados, no los más complicados de toda mi vida pero si recientes, siempre eh sido alguien a quien no le gusta minimizar sus emociones, mi mente ha sido un revoltijo de emociones gracias a un término de un capítulo en mi vida y si me refiero al término de una relación, pero prefiero decirle así aunque suene ridículo, Alex solo fue un capítulo de mi vida, soy tan joven no puedo decir que fue el termino de mi vida, pero si me lo preguntaras hace un par de semanas no te diría esto, te diría que ya no tenerlo conmigo haría que entrara a un túnel, tan largo que tardaría años en llegar a su final, en el que aparte de obscuridad encontraría tormenta y soledad.

No puedo aceptar que Alex decidió alejarse de la manera más incoherente, prefirió escribir un sin fin de palabras y enviar audios tan largos en vez de decírmelo de frente, ¿quién hace eso después de gritarle al viento su amor hacia ti?, se excusó en supuestos argumentos para que lo dejara ir, días después sigo sin entender, podrás imaginar como lo tome en el momento de ver su mensaje. Nunca fui alguien quien se expresará con facilidad, pero claro que lo harías después de casi un año de relación después de una pelea un poco tonta.

A este punto no se decirte si soy fan de la intensidad en una relación, a donde voy escucho que les gustaría alguien que siempre este al pendiente de ellos, con mensajes, visitas a cada rato y salidas junto con regalos. Todo esto lo tuve con él, y estaría en lo incorrecto si te dijera que no lo supe aprovechar por que fue todo lo contrario, y es que es tan bonito saber que se preocupan e interesan por ti, el problema es cuando esa intensidad se vuelve inoportuna, no sé si ya has vivido ese tipo de intensidad inoportuna, pero para mí es lo más agobiante que pueda sucederme, es como si estuviese revolcándome una ola del mar.

Amaba todo de Alex, o eso creía, de lo que estaba segura era que amaba tenerlo en mi vida porque creía lo que varios llegamos a creer y me refiero al "es diferente al resto", y no está mal, digo esto no solo nos pasa a adolescentes, aunque a la mayoría como yo, sí. Y es que por más que ames a una persona existirán cosas que no te agraden, como respuestas a acciones, su ortografía, gustos musicales, manera de vestir o hasta el acento y es que suena exagerado pero este tipo de cosas pequeñas son las cosas que te pueden hacer amar más o menos a esa misma persona. Se que no lo odio después de todo, al contrario, lo extraño, sentía que existía algo que me unía a el de manera perpetua, más que un hilo rojo sentía algo con más peso y fuerza que nos unía. Es verdad que no puedes odiar a una persona que tanto amabas al día siguiente, así como también es verdad que el odio está a un paso del amor, es muy confuso y contradictorio, como si no tuviera fin, pero ¿cómo hago para no odiarlo y para no amarlo?

Es tan fácil que a esta edad confundamos sentimientos que fue lo que me haría creer que amaba todo de él y él amaba todo de mi...