want so bad 承 minsung

1. Un poco de colágeno para almorzar.

Minho odiaba los lunes.

¿Realmente a alguien le gusta? Era muy difícil volver a levantarse temprano para ir a la escuela después de haber tenido dos grandiosos días libres para hacer nada. Odiaba que la primera hora del lunes empezara con clases de historia, la materia y la voz del señor Kang eran la combinación perfecta para quedarse dormido por horas. Incluso pensó más de una vez que no estaría mal grabar una de sus clases para utilizarlo esas noches de insomnio que lo atacaban de vez en cuando.

Sin duda, odiaba los lunes.

"Amo los lunes"

Volteo al sentir como alguien se sentaba a su lado, aunque obviamente sabía de quien se trataba.

Han Jisung.

"¿Por qué? Digo, es horrible escuchar la historia de cómo se creó el país con la voz del profesor. Debería renunciar y abrirse un canal de YouTube de ASMR, le iría mucho mejor, incluso yo me suscribiría"

El omega soltó una pequeña carcajada mientras sacaba de su lonchera un topper con comida, la abrió para ver el contenido y la volvió a cerrar una vez se aseguró que era el contenido correcto, para al final pasárselo a Minho.

"Porque los lunes para mí significan que puedo estar contigo la mayor parte del día durante cinco días de la semana" Se encogió de hombros.

"Eso es muy cursi"

"Lo sé, pero soy tu novio y tienes que aguantarlo"

Minho sonrió y le planto un pequeño beso en la mejilla, haciendo Jisung volviera a reír.

"Eso también es cursi, Lee"

"Lo sé, pero soy tu novio y tienes que aguantarlo" Dijo con el mismo tono burlón que usó el contrario.

Como respuesta, tuvo un pequeño empujón que lo hizo moverse unos centímetros, asustándolo, no por el repentino movimiento, sabía que Jisung solía ser algo tosco de vez en cuando. Lo que realmente le asustó fue el pensamiento de quedarse sin almuerzo si no hubiera agarrado bien su lonchera.

Después de una pequeña pelea de empujones decidieron comer lo que el alfa había preparado para los dos, enfrascados en una conversación con temas aleatorios. Ambos estaban sentados en el piso del gimnasio de la universidad, no estaba permitido el ingreso de alimentos, pero a ellos les importaba un pepino. Era un lugar tranquilo cuando no había nadie entrenando y les gustaba pasar los ratos libres ahí.

Aunque no era tan divertido cuando los estudiantes hormonales se escondían entre las butacas para tener relaciones sexuales y tenían que escuchar sus cochinadas mientras comían.

También sabían un montón de chismes que no eran de su incumbencia, pero no podían evitar afinar la oreja al escuchar conversaciones interesantes. Las personas no se daban cuenta de la presencia de ambos, por lo que soltaban todo, así que no podían culparlos.

No eran chismosos, eran comunicativos.

"Quien diría que a la profesora Park le gusta acostarse con chicos veinte años menores que ella, parecía una señora seria"

"El colágeno, supongo"

"Eso explica por qué parece más joven de lo que aparenta" Jisung se encogió de hombros"

"Tal vez debería hacer lo mismo" Minho soltó antes de meterse una salchicha con firma de pulpo a la boca.

"¿Qué cosa?"

"Meterme con alguien menor para obtener colágeno" Jisung entrecerró los ojos ante las palabras del alfa y le soltó un pequeño manotazo en el brazo.

"No puedes, recuerda que tienes novio" Se señaló así mismo. "Además, tienes veinte, para que mierda quieres colágeno"

"¿Y qué? Tendré veinte, pero me truenan las rodillas con cada movimiento que haga y creo que la semana pasada encontré una arruga en mi frente"

"Eres un exagerado, Minho" El omega rodo los ojos divertido.

"Bien, ríete si quieres, pero cuando ya no pueda caminar por la artrosis en mis rodillas, tú serás él que tendrá que moverme en silla de ruedas a todos lados"

"Sí, sí, lo que tú digas, rey del drama"

Tuvieron que pasar alrededor de otros siete minutos de un Minho quejándose de sus inexistentes arrugas y patas de gallo para que recordara algo importante, paró de hablar repentinamente y Jisung volteó a verlo por el extraño silencio.

"¿Qué pasa? ¿Ya te cansaste de quejarte?"

"Tienes diecinueve" Minho parecía asombrado ante la información que había olvidado.

"¿Sí? Debió ser un gran logro recordarlo, te mereces un premio" Jisung habló de una forma burlona mientras terminaba su almuerzo.

"Puedo robarte el colágeno"

El omega miró a su novio, tratando de aguantar en soltar una carcajada, pues Minho lo había dicho de una forma tan seria, demasiado para el tema tan random de el que estaban hablando.

"Solo eres más grande que yo por unos meses, en menos de dos meses tendré veinte también"

"Aun así, debería intentarlo"

"Está bien, hazlo, si tan feliz te hace"

Cuando Jisung dijo esas palabras, realmente no esperaba que Minho se abalanzara contra él. No utilizo mucha fuerza, pero lo tomó desprevenido, así que ambos terminaron en el piso, Minho arriba de Jisung.

"¡Minho!" Chilló.

"Juro que no te dolerá mucho"

Jisung soltó un gran grito al sentir la boca de Minho en la parte pequeña de su cuello donde el collar anti mordidas no tapaba del todo, cerca de la clavícula. Sintió como este chupaba la piel.

El maldito le estaba haciendo un moretón.

"¿Qué mierda haces? Mi papá se enojará conmigo si ve la marca y a ti no te dejará entrar a la casa, otra vez"

"Estoy robándote el colágeno" Ignoro lo último, pues puede que le tenga un poco de miedo a su suegro.

"No creo que funcione así" Minho levantó su cabeza del cuello de Jisung para verlo.

"¿Te chupo el pene entonces? Puede que consiga mejores resultados"

"Eres un asqueroso" Fingió arcadas exageradas.

"Pero aun así me quieres, por eso estás conmigo" Minho dejó en la frente de Jisung un beso para demostrar su cariño.

"Tienes razón" Sonrió gustoso ante los afectos del alfa, soltando pequeños ronroneos de paso.

Minho aprovechó que Han estaba distraído para volver a atacar, pero esta vez haciéndole cosquillas en sus costillas, sabía que el chico era muy sensible y cualquier cosa lo haría sentir cosquillas. Y Minho se aprovechaba de eso seguido, le gustaba escucharlo reír.

Y aunque no lo admitiera en voz alta, le gustaba ver a su novio después de un fin de semana largo sin verlo.

Puede que a Minho le gusten los lunes un poco.