Cartas para mí Madre

Capitulo # 11

Draco pasó sobre su ropa la varita para borrar todo aroma de Astoria, quería dormír tranquilo junto a su castaña.

Al subir a su habitación tomó un baño, se colocó solo la parte inferior del pijama. Y se metió a la cama para quedarse dormido abrazando a su mujer.

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A la mañana siguiente Jean y Henry llevaron a Dafne al Hospital General de Oncología para su primer chequeo general.

Dafne iba optimista, moría por regresar a Hogwarts para ver a su amado pelirrojo..

Fueron recibidos por la enfermera Mary, quien guío a Dafne a la máquina de exploración general.

Despacio se cambió a la bata del hospital y manteniendo sus nervios a raya hizo tal cual le explicaron.

Empezó la exploración general, y mientras el pitillo sonaba, la memoria de Dafne la llevo a otros rumbos, una infancia llena de lujos, pero carente de amor. Luego el contrato matrimonial con un Theo triste, ambos sentados en el jardín de su casa.

Theo acariciba su cabello rubio lacio, más su mirada perdida denotaba que extrañaba a alguien más.

Ella sonreía imaginando el cambio de apariencia de su ahora prometido por ojos azules cielo, cabello rojo y pecas.

Más después de derrocado el loco mestizo, sus sueños se hicieron realidad.

Al salir de la exploración se encontró con los ojos felices de Preston.

_ Tu salud es óptima, los niveles de glóbulos blancos es normal, no hay anemia, tu médula ósea está totalmente recuperada.

A Dafne se le iluminó el rostro río a carcajadas por la felicidad, luego miro a sus padres muggles, no sabía cómo reaccionar, no quería dejarlos.

Sabía que debía regresar al colegio a terminar sus estudios, vería a sus amigos, a su novio.

Mientras ella estaba sumisa en sus pensamientos, Henry se levantaba emocionado abrazando a William. Jane lo siguió y los agradecimientos no faltaron. Todo era felicidad. Incluso Mary lloraba también.

Juntos salieron los Granger de allí con Dafne en medio.

Al llegar al auto. Henry preguntó _¿Qué hacemos ahora? ¿A dónde quieren ir? ¿Vamos a celebrar?

Dafne los miro a cada uno, hace días se le había ocurrido algo loco, pero quería contárselos para ver qué opinaban. Se mordió el labio nerviosa.

Jean que ya había aprendido a conoce sus gestos, la miro cómplice para alentarla a continuar.

Suspiró profundamente y les dijo _ he pensado si no les molesta pedirles que me reconozcan legalmente como su hija, me gustaría llevar su apellido.

Henry se sorprendió mucho más no pudo evitar reír de felicidad, él ya la consideraba su hija. Pero si la niña quería llevar su apellido, él no se lo iba a negar.
_¡Vamos a ver a un notario! _

Avanzaron hacia el centro de Londres, al área comercial para hallar a un muy amigo abogado que casualmente tenía una notaría.

Dafne llevaba consigo algunos documentos propios, e incluso un acta de nacimiento que Theo alguna vez le consiguió de manera Muggle.

Henry entro primero a consultar el trámite, pero su amigo le dijo que si ella estaba de acuerdo y presentaban 3 testigos, no habría problema con el cambio de apellidos.

Así los 3 entraron a un restaurante a esperar a Elizabeth, Narcisa y Lory quienes muy felices aceptaron ser  testigos.  Al cabo de 2 horas y las firmas previas, la pequeña rubia sería llamada desde ese momento... Dafne Dayan Granger Duerre. Una vez se hubo dado el cambio, en todos los libros mágicos ocurrió lo mismo, así como en el Colegio Hogwarts.