Incondicional

47.

Cuando comencé a sospechar que estaba embarazada pensé era parte de mi imaginación, como yo iba a ser la primera del grupo de amigas en convertirse en madre, parecía prácticamente imposible. Finalmente regresamos a Nueva York y mientras estaba haciendo una compra bastante cotidiana me compré un test de embarazo para resolver la duda, mientras el test me informaba que era positivo de fondo escuchaba a Peter gritar "Donde estas villano, te voy a encontrar" eso significaba que me iba a convertir en madre junto a mi mejor amigo de toda la vida, pensé sorprendida, sin decirle nada me hice análisis para confirmar todo antes de decirle, que fuese el día de mi cumpleaños lo hizo el doble de especial, lloramos juntos de felicidad.

—espero que solo nos den buenas noticias —dijo Peter sentado en la sala de espera mientras caminaba de un lugar a otro— ¿Que puede salir mal? Bueno, si tiene un problema o algo así es nuestro hijo, lo amaremos de todas formas, lo ayudaremos a que viva feliz y tranquilo —mientras el no dejaba de caminar de un lugar a otro, yo pensaba en si era posible comprar chocolate para derretir y poner frutillas— ¿Estas nerviosa?

—no —respondí con una sonrisa— estoy ansiosa

—Ufffff y como haces para no estas nerviosa, piensas en algo especial? —preguntó sorprendido

—No, solo pienso positivo, sé que todo estará bien —respondí con seguridad— ahora siéntate porque todos te están mirando —estaba lleno de parejas esperando por su ecografía

—Todos los que estamos en este pasillo están pasando por lo mismo o pasaron por lo que estoy viviendo ahora, lo entienden perfecto —dije con una leve sonrisa— ¿Como se lo vamos a decir a nuestra familia? Deberíamos reunirnos todos en casa, una junta o algo así

—Un asado en mi casa —respondí pensando en lo increíble que era el asado de papá, no podía dejar de pensar en comida

—Mariana Esposito —dijo la doctora con una sonrisa

—Acá, esos somos nosotros —dijo Peter con una sonrisa, me estaba avergonzando pero no quería decirle nada porque me daba mucha ternura, entramos a la sala y me senté en una camilla para que me examinara, me pesó y midió, obviamente me dio risa, luego me hizo algunas preguntas típicas

—Ok, ahora recuéstate en la camilla y levántate la remera —dijo con una sonrisa— ¡Padres primerizos! —celebró— que lindo, me gusta cuando vienen hasta acá con los ojitos brillando, con el padre emocionando por saber todos los detalles, las mejores parejas

—¿Hay algo que no pueda comer? —preguntó con el celular en la mano, estaba anotando todo lo que la doctora decía

—bueno, nada crudo obviamente... por las bacterias, pero no te preocupes que te voy a dar una lista completa para que no tengas que memorizar nada —dijo mi doctora riendo— vamos que ver... —agregó mirando la pantalla con atención, se quedó en silencio unos segundos y luego soltó una sonrisa— lo tenemos acá, formado muy bien —giró la pantalla y comenzó a tomar unas medidas, Peter me miraba con los ojos brillando, yo no podía creer que estabamos conociendo a nuestro bebé así de rápido

Pudimos escuchar sus latidos, la doctora confirmó que era un bebé sano en su totalidad, hicimos silencio para escuchar sus primeros latidos, así que con eso confirmamos que estaba en mi sexta semana de embarazo. Necesitaba contarle a mis madres esta situación pero si les decía que nos juntáramos iban a caer con sus novias, no tenia nada en contra de ellas, pero este era un momento familiar, tuve que inventarles algo para vinieran solas al departamento.

—Hola, llego tarde —dijo Bella con una sonrisa y cuando vio a Eugenia me miró— ¿Que pasó? —entonces miró a Peter— ¿Pasó algo malo?

—Estoy igual que tu —dijo Eugenia riendo— yo pensé que estaban peleados y me vine volando, hace quince minutos estoy tratando de resolver que pasó