Capítulo 51/Lado A

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Miku Nakano, la tercera hermana, la hasta ahora olvidada por fin vuelve a la historia.

Retomando la historia justo despues de la conversación del abuelo Nakano con Miku

Interior de la Mente de Miku

Miku, en su habitación en el psiquiátrico, se encuentra sentada en la cama, mirando fijamente hacia el vacío. En su mente, un torbellino de pensamientos y emociones la consume.

Miku (pensando): ¿Por qué, Fuutaro? ¿Por qué con Itsuki y no conmigo? ¿Qué tiene ella que yo no tenga? ¿Acaso no fui lo suficientemente buena?

Imágenes del pasado, momentos compartidos con Fuutaro, bailan frente a sus ojos.

Miku (pensando): (frunciendo el ceño) Siempre estuve ahí para él, siempre lo apoyé. ¿Por qué no fui suficiente?

En su mente, se forma la figura de Itsuki, una sombra que la atormenta.

Miku (pensando): (con dolor) Incluso después de todo lo que pasó, siempre estuvo ahí, siempre lo tuvo. ¿Por qué, Itsuki?

La imagen de Fuutaro con otra mujer, desconocida para Miku, se proyecta en su mente.

Miku (pensando): (con rabia) No solo perdí ante Itsuki, también ante ella. ¿Quién es esa mujer? ¿Por qué él la eligió a ella y no a mí?

El torbellino de emociones aumenta, y Miku se agarra la cabeza como si intentara detener el caos en su mente.

Miku (pensando): (susurrando) No puedo seguir aquí. Necesito salir, necesito entender. Necesito respuestas.

Decidida y con una mezcla de dolor y furia en sus ojos, Miku se levanta de la cama. La crisis en su cabeza la impulsa a buscar respuestas fuera del psiquiátrico, sin importar las consecuencias.
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Psiquiátrico - Día

Miku, en su rutina diaria en el psiquiátrico, se encuentra en el área común donde interactúa con otras pacientes. Su mirada, antes perdida, ahora está enfocada en cada detalle a su alrededor.

Miku (pensando): (observando a las pacientes) Debo encontrar una oportunidad. Algo que pueda usar para salir de aquí.

Con astucia, Miku se acerca a una de las mesas donde algunas pacientes están jugando a las cartas. Se sienta discretamente, aparentemente absorta en su propio mundo.

Paciente 1: (sonriendo) Miku, ¿te unes a nosotras?

Miku: (sonriendo falsamente) Claro, ¿por qué no?

Mientras juegan, Miku presta atención a las conversaciones a su alrededor, buscando pistas o información que pueda serle útil.

Paciente 2: (murmurando) Escuché que hoy llegara una chica nueva, una niña.

Miku (pensando): (con indiferencia) ¿Una niña?

Continúa observando y escuchando, recopilando información. Mientras tanto, su deseo de escapar y buscar respuestas se intensifica con cada día que pasa en esa institución.

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Psiquiátrico - Día

Miku, inmersa en sus propios pensamientos, camina por el pasillo del psiquiátrico cuando se topa con Rachel Gardner, una joven que recientemente ha sido ingresada. Rachel está sentada en un rincón, mirando fijamente al vacío. Tiene el pelo rubio hasta las caderas, grandes ojos azules y un marco menudo.

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