Chainsaw Man { Nayuta Necesita Mamá }

Nayuta necesita mamá

"Entonces... Te la encargo." Dijo aquel hombre antes de esfumarse en cuanto Denji le quitó la vista de encima.

"Maldito viejo..." Susurro tras haberse dado cuenta de su ausencia. Para ser un hombre adulto era silencioso y veloz.

Miró a la pequeña niña frente a él, su cabello negro caía hasta sus hombros mientras mantenía sus amarillos ojos fijos en el chico.

"Ey, ¿Nayuta? ¿Hay algo que quieras cenar? Que no sea carne..." Preguntó con un pequeño escalofrío recorriendo su espalda.

Estaba ya asqueado de la carne. Semanas enteras solo comiendo eso.

"Pan tajado." Respondió señalándolo.

"Un demonio fácil de complacer."

Y de esa manera comenzaron sus días criando a Nayuta, la nueva encarnación del Demonio del Control. No era el mejor, y cometía errores, pero ya aprendería a ser una buena figura paterna.

"No quiero eso." Replicó desviando la cabeza.

Era... ¿Un berrinche? ¿La niña estaba haciendo un berrinche? Nunca la había visto de esa manera.

"¿Qué debo hacer?" Se preguntó mientras se llevaba la mano al mentón.

Y es que la chica debía entrar a la escuela, pero no quería.

"¿Qué haría Aki?" Se dijo recordando a aquel chico que fue su mejor amigo, su hermano. Lo extrañaba.

El mayor fracaso de su vida fue perderlo.

"¡Hey! Power, Denji." Recordó la imagen del hombre ofreciéndoles goma de mascar. De esa manera los mantenía a raya cuando eran más insoportables.

"Oye, Nayuta. ¿Te gustan las gomas de mascar?"

"Prefiero el algodón de azúcar."

"Bien, si vas a la escuela te compraré uno saliendo."

Nayuta lo analizó unos segundos, reflexionando las ventajas y desventajas de ello.

Lo malo era ir a la escuela, lo bueno era el algodón de azúcar. Era una decisión difícil como para poner ambas partes en una balanza.

"Está bien, iré." Aceptó.

Los siguientes días fueron de preparar las cosas para asistir a la escuela. Hasta que se llegó el momento.

"¡Presta atención y se buena, Nayuta! ¡Pasaré más tarde a recogerte!" Le dijo mientras la veía entrar a la escuela con un paso dudoso.

"Ese chico es ruidoso. ¿Será un padre? ¡Es muy joven!"

"Tal vez solo sea el hermano de una niña."

Decían algunas madres de familia en el lugar. Al rubio no le molestó oírlas, por lo que simplemente decidió caminar por la ciudad.

Tenía aún algo del dinero ahorrado tras la muerte de Aki, y algo que le dio Kishibe. Pero necesitaba ahorrar para la universidad de Nayuta, y la suya.