Lee Yeong-ro, la hermana pequeña de Cheong-san, por sus altos conocimientos la subieron a su grado, es la vicepresidenta del salón pero realmente le daba igual, solo le asignaron el cargo.
Lee Su-hyeok lleva enamorado de Yeong-ro desde que era un ni...
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Yeong-ro se encontraba de camino a la escuela con los audífonos puestos.
No tenían ningún examen hoy por lo que iba tranquila.
Necesitaba notas muy altas para entrar a la Universidad de Seúl.
Pero no sabía que quería ser.
Se le estaba acabando el tiempo.
Le habían adelantado un año de la vida de estudiante.
Se supone que la vida de estudiante tiene que tener un equilibrio.
Cumplir tus obligaciones como puede ser estudiar pero sin pasarse.
Ella no tenia ningún equilibro.
Y en parte le daba miedo crecer.
Llegó a su salón y se sentó metida en su celular.
Le había estado dando vueltas a lo de Su-hyeok pero realmente no sabía porque le daba tanta vuelta.
Estaba viendo las nuevas publicaciones de su grupo favorito el cual había anunciado la renovación de su contrato.
Su-hyeok llegó al salón y vio a Yeong-ro en su asiento.
Podía escuchar la música de sus auriculares de lo fuerte que estaba la música.
Se acercó a ella y le tocó el hombro dándole un leve susto.
Yeong-ro se quitó uno de sus audífonos para poder escuchar.
—Si pones la música tan alta te va a lastimar los oídos.—le dijo Su-hyeok a Yeong-ro.
—Lo sé, pero si la pongo más baja no la disfruto.—le contestó Yeong-ro.
Ella era una persona fría.
Excepto con alguien de mucha confianza.
Y Su-hyeok no era el caso.
—¿Dónde será la clase de hoy?—le preguntó Su-hyeok.
—Mis padres estarán en el restaurante esta tarde y mi hermano se irá a la academia con On-jo, puede ser en mi casa, si quieres claro.—le explico Yeong-ro.
Su-hyeok pensaba que le iba a dar un paro cardíaco.
Su crush desde que era pequeño le estaba invitando a su casa.
Para estudiar.
Pero eso era lo de menos.
—Está bien.—dijo Su-hyeok y Yeong-ro se volvió a poner su audífono.
Su-hyeok se fue a su asiento mientras miraba a Yeong-ro.
Yeong-ro se volteó y volvió a ver que Su-hyeok la miraba.
¿Por qué la estaba mirando todo el rato?
La señorita Park entró al salón y todos dejaron sus celulares para empezar la clase.
—Tengo una noticia para ustedes.—dijo la maestra y todos me prestaron atención.—Hay dos actividades programadas, el baile de mediados de trimestre y una salida a la nieve a esquiar.—dijo la maestra y todos se emocionaron basto.
—¿El baile cuando es?—preguntó Dae-su.
—El lunes.—le contestó la maestra.
—Pero hoy es viernes.—dijo Dae-su.
—No se dan tantos días de antelación porque como saben es una tradición de la escuela que se suele hacer en último año, pero el director me acaba de avisar que los grupos pares lo harán.—dijo la maestra y tomó un bloque de papeles.—Yeong-ro, ¿puedes repartir esto?—le preguntó la maestra.
Yeong-ro se levantó de su asiento y empezó a repartirla entre todos sus compañeros.
Cuando se la entregó a Su-hyeok sus manos rozaron provocando una electricidad en el cuerpo de ambos.
Ambos se miraron a los ojos y Su-hyeok le sonrió provocando un sonrojo en las mejillas de Yeong-ro.
Yeong-ro terminó de entregar los papeles y tomó uno para ella antes de sentarse en su lugar.
—La salida será en dos semanas.—dijo la maestra y comenzaron con la clase.
Las clases pasado rápido y ese día les tocaba limpiar.
Su-hyeok observaba a Yeong-ro limpiar las ventanas del salón mientras el limpiaba las del pasillo.
—Tienes que pedírselo.—le dijo Dae-su.
—Me va a rechazar.—dijo Su-hyeok sin dejar de mirarla.
—Eres uno de los más populares de la escuela, tú puedes.—dijo Woo-jin.
—Si me rechaza, ¿ustedes me harán la terapia?—preguntó Su-hyeok y todos asintieron.
Cada uno acabó de limpiar lo que le tocaba y se fueron a casa.
Yeong-ro acabó de limpiar y se puso los audífonos con Pretty Savage sonando por ellos.
Cuando llegó a la salida se encontró con Su-hyeok esperándola afuera.
Llegaron a casa de Yeong-ro y se quitaron los zapatos.
—Podemos ir a mi habitación si quieres.—dijo Yeong-ro y este asintió.
Llegaron a su habitación y Su-hyeok notó lo decorada que estaba, llena de álbumes y posters de BLACKPINK.
—Voy a por una silla.—dijo Yeong-ro y tomó la silla del cuarto de Cheong-san para ponerla junto a su escritorio.
Empezaron con la clase y Su-hyeok se esforzaba por concentrarse en el ejercicio pero tener a Yeong-ro tan cerca no ayudaba.
—Y creo que ya estaría por hoy.—dijo Yeong-ro cerrando el libro.
—¿Puedo preguntarte algo?—le pregunto Su-hyeok y ambos se miraron mutuamente.
—Ya lo estás haciendo.—dijo Yeong-ro cortando el contacto visual para ordenar sus libros.
Lee Yeong-ro ¿por qué te pones nerviosa?
Pensó la menor.
—¿Quieres ir al baile de la escuela conmigo?—le preguntó Su-hyeok, a quien le iba a dar un paro cardiaco, y Yeong-ro lo miró.
—Ah...—dijo Yeong-ro dudosa.—No tenia pensado ir.—dijo Yeong-ro y Su-hyeok ya estaba pensando cuantas sesiones de terapia le iban a dar sus amigos.—Pero, por mi podemos ir juntos.—dijo Yeong-ro y Su-hyeok le sonrió.—Como amigos.—dijo nerviosa.
Fuck, eso dolió
—Sí, como amigos...—dijo Su-hyeok tratando de aguantar las ganas de decir lo contrario.
Su-hyeok recogió las cosas y fueron a la puerta.
—Gracias de nuevo, amiga.—le dijo Su-hyeok una vez se puso los zapatos.
—No hace falta que me agradezcas cada clase.—le dijo Yeong-ro.—Los amigos están para ayudarse.—
—Exacto, sí alguna vez necesitas ayuda no dudes en avisarme.—le dijo Su-hyeok y Yeong-ro asintió.
Se despidieron con la mano y Su-hyeok se fue.
Su-hyeok en vez de ir a casa fue directo a una tienda de Kpop y compró el album de BLACKPINK The album.
Mientras Yeong-ro traía la silla de dio cuenta que había un hueco que ponía "Aquí irá The album cuando lo consiga"
