capitulo 29

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Ultima vez

Dolores: de todos modos ella está muy tranquila conteniendo la respiración, me pregunto....

*Se escuchó el sonido de los utensilios de Dolores cayendo al piso de madera mientras sus ojos se volvían pequeños como alfileres, se tapó la boca con la mano mientras se levantaba apresuradamente*

Dolores: ¡¡hubo un disparo!!

Ahora

*En el segundo en que las palabras que Dolores había dicho se registraron dentro de su cerebro, fue una carrera hacia la habitación de Antonio. Luisa obviamente ganó con Dolores en segundo lugar y sorprendentemente Isabela no muy lejos de ella, Casita tuvo que abrir la puerta de Antonio ya que Luisa estaba al 100% atravesándola. Siguieron corriendo hacia el otro lado de la habitación para encontrar dichas puertas. La sangre corría tan rápido dentro del cerebro de Dolores, el sonido de otros corriendo, gritando, llorando, hacía casi imposible escuchar a Mirabel y su corazón*

Mientras tanto con una Mirabel muy viva

*Mirabel sacó la cabeza de la mira del arma y caminó hacia el ciervo que acababa de disparar*

Mirabel:son 20 cuanto mas necesitamos?

Ponce: 20 más deberían ser suficientes para reponer las carnes en encanto al menos hasta el próximo mes, ayúdenme a poner la bestia en el carrito con el resto.

*Mirabel asintió mientras ambas dejaban allí los rifles apoyados contra un árbol y fueron a buscar el anime, ambas lucharon por levantar al animal de 400 libras, caminan lentamente hacia el carrito*

Mirabel: Jesús este es más pesado que el resto, ¿crees que era el líder de la manada?

Ponce: es una posibilidad, ok el 3...1...2...3

*Ambos resoplaron y lanzaron a los animales al aire aterrizando en el Carro con el resto de los animales cazados. Ambos tomaron un descanso para respirar, Ponce tomó un poco de agua de su cantina y le ofreció un poco a Mirabel quien la aceptó*

Ponce: hermoso día, ojalá pudiera pintarlo.

Mirabel: Te sigo diciendo que le digas a tu padre, no tienes que dejar el trabajo familiar. Pero como pedir un día libre al menos una vez a la semana para pintar. Sigo diciéndote que puedo cubrirte

*Ponce suspiró y asintió mientras regresaba a la cantina y bebía un poco más. No es la primera vez que tienen esta conversación*

Ponce: Sé que tienes razón, sé que debería pero me gustaría. Mi hermano ya es una gran decepción, tengo miedo de que él también me vea así y...

*Ambos dejaron de hablar cuando escucharon un estruendo que se acercaba, se levantaron rápidamente*

Mirabel: ¡T'Challa!

*Mirabel gritó a las sombras, de ellas salió su hermano parce, gruñendo*

*Mirabel gritó a las sombras, de ellas salió su hermano parce, gruñendo*

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