Capítulo 14.

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Arthur🌼

Volver a verla me emociono y creo que hasta mi mamá noto lo mucho que me cambio el rostro y el comportamiento cuando la vi es que, se veía tan hermosa, el cabello se lo corto un poco pude notarlo, antes le llegaba a los codos y ahora le llega un poco más debajo de los hombros pero sigue teniendo esa esencia de ser ella, tan auténtica y respondona. Sus ojos marrones me miraban mal en momentos y me daba mirada de reojos que me hacían querer hacerla mirar mis ojos todo el día. Cuando colocó su mano en mi hombro e hizo que esa pareja se fuera no pude evitar ponerme tenso, me puse muy nervioso porque recordé sus manos en mis hombros cuando nos besamos esa noche; ella se alzaba un poco porque soy muy alto y ella quería ese beso tan como yo ¿Por qué no puedo dejar de pensar en ella? ¿En el beso? ¿En su voz cada vez que me responde groseramente?

— ¿Arthur? Ese brillo está de nuevo en tus ojos — anuncia mi madre con cierta emoción que me revuelve el estómago.

— ¿Cuál brillo? Solo es la luz de la lámpara, mamá — le respondo recogiendo el montón de documentos regados en mi escritorio.

— Chloe es encantadora, y esa tensión que se siente cuando se hablan ¡Santo Dios! Es perfecto, debes hablarle. Llámala.

— No puedo llamarla, sigue enojada.

— ¿Por qué está enojada? ¿Qué le hiciste? — pregunta sentándose en un sillón cerca de mi.

— No te lo voy a decir mamá. — Ella me mira fijamente y sentir su mirada sobre mí me incomoda porque siento que en cualquier momento soltara un montón de cosas que pueden ser hirientes — Ok. La ignore por un mes, después de que Jennifer me llamará.

— ¡Ángeles del cielo! Y vuelve a ser nombrada esa mujer. No quiero escuchar nada sobre ella en lo que me quede de vida.

— Mamá…

—¿Qué hablan ustedes dos? — escucho la voz de mi padre a mis espaldas. Me giro y lo único que hago es observarlo en silencio.

— Arthur conoció a una mujer encantadora y no quiere llamarla.

—¿Conociste a una mujer? — pregunta con dificultad. Asiento — Y es encantadora según tu madre, deberías llamarla si te gusta.

— Esta claro que ambos se gustan cariño pero Arthur no quiere llamarla porque ella está enojada.

— Si ella está enojada debes hacer que deje de estarlo, hijo — coloca su bastón en la pared y se acerca caminando hasta donde está mi madre—, esa chica debe estar esperando que la llames, así son las mujeres. No está enojada solo está fingiendo para que tú muestres interés.

Mamá asiente y yo dudo un poco pero al final las palabras de mi padre me hacen reflexionar. Ella está enojada porque la ignore y porque no he hecho nada por ella en el tiempo que llevo conociéndola, necesito hacer cosas por ella pero, tengo miedo, miedo de lastimarla o volver a salir lastimado.

— No pienses demasiado y llámala — declara papá agarrando su bastón y retirándose de la habitación, mamá lo hace seguido de él dejándome un beso en la cabeza.

¿Debería llamarla como ellos dicen? ¿o sino ignorando todos mis pensamientos hacia ella?

¡Al carajo! ¿Qué pierdo si la llamo? Nada.

Marco el número y coloco mi teléfono en mi oreja.

— ¿Hola? — pregunta con un tono de voz frío que me hace dudar si es ella.

—¿Chloe? — consigo preguntar.

— Si, soy yo. ¿Quién habla? — su voz cambia a un tono discreto que me hace pensar que quizás piensa que soy alguien importante.

Margaritas [Flores #1]Where stories live. Discover now