—¡Con una mierda ChanYeol! ¡No es gracioso! — Se queja Soo ya que Yeol decidió aparecer de la nada mientras el más bajo acomodaba los libros del estante.
—Lo es para mí —se defiende sin ponerle mucha importancia ya que el si se estaba divirtiendo.
Solo dos semanas fueron necesarias para que esos dos aprendieran a llevarse bien, o al menos para que se sientan cómodos con sus presencias ya que Yeol insiste en asustar al más bajo cada que tiene la oportunidad.
En cambio KyungSoo intenta llevarse bien de todas las formas posibles, al inicio fue por miedo a que el fantasma lo embrujara o esas cosas que hacen los fantasmas pero ahora se trata de crear un vínculo en verdad importante.
No sabe por qué decidió mostrarse a él en primer lugar pero lo agradece, aunque en estos momentos desearía que ese ser dejara de molestarlo ya que intenta concentrarse en el proyecto de su escuela.
Lee con atención su cuaderno mientras hace ademanes con sus manos y Yeol se limita a observar con curiosidad, no entiende para qué tanto movimiento.
—Creo que hablar con un muerto te ha vuelto loco, ya nadie te va a querer —dice Yeol seriamente ganándose una mirada enojada de parte del más joven— vas a tener que quedarte a vivir aquí conmigo para siempre, hay espacio en la bodega para ambos.
—Aunque me encanta la idea la vivir con un fantasma tendré que declinar esa oferta, idiota, solo estoy practicando mis parlamentos— informa mostrando el guion escrito en su cuaderno—- mañana es la presentación de mi obra y quiero estar listo.
—No sabía que actuabas.
—No lo hago, es tarea —asegura cerrando su cuaderno y se dirige a los estantes en donde se encuentran los libros siendo seguido por ChanYeol y toma uno de su lugar— mira, es basado en este libro, en vez de molestarme podrías ayudarme a mejorar.
—No, prefiero molestarte pero lo leere de todos modos— se niega tomando el libro con una sonrisa— aunque me gustaría verte actuar ya en la puesta en escena.
—También a mi me gustaría que vinieras, sé que es imposible que salgas de la biblioteca pero me ayudarías a no estar tan nervioso.
—¿En serio? ¿Te ayudará?-— pregunta Chan frunciendo el ceño.
—Sí, sé que es extraño pero me siento en calma cuando estás conmigo, por eso me gusta venir —asegura con una sonrisa en el rostro y vuelve a leer sus parlamentos.
Esa confesión tomó al espectro por sorpresa, sabe que se lleva bien con KyungSoo, después de todo fue quien inició todo para poder hablarle pero no esperaba que ese chico sintiera lo mismo que él cuando está a su lado.
Calma.
—¿En serio es importante para ti?— cuestiona Yeol haciendo que Soo deje de leer.
El menor nota esa mirada seria y el ambiente normalmente relajado se ha tornado más frío, piensa que dijo algo malo o de alguna manera que desconoce ofendio a ChanYeol.
—Claro que es importante para mí, nos estamos haciendo cercanos y es obvio que quiero mostrarte más cosas pero yo entiendo que no te sea posible…
—Soo, ya es tarde —advierte Solar abriendo la puerta y Yeol se desvanece al momento dejando caer el libro que Kyung le prestó— Qué haces?
—Lo siento, estaba revisando unas cosas para mi obra de mañana, ya voy.
—Bien, te veo el lunes y mucha suerte con tu obra, sé que lo harás bien— da ánimos luego de un pequeño abrazo y sale de la biblioteca.
Soo espera un poco para ir a la recepción y guardar sus cosas incluyendo el libro en el que se basa su obra, no está seguro de subir a ver a Yeol para despedirse pero tampoco se siente correcto dejarlo sin decir nada.
Da un par de golpes en el escritorio, no son al azar, siguen un patrón que aprendió del libro de clave morse que usó al inicio para comunicarse.
"Nos vemos mañana."
Espera alguna respuesta cuando oye ese patrón peculiar que lo llenó de miedo la primera vez que lo escuchó.
"Sube."
Toma su mochila y sube a la bodega, aunque sabe que ese fantasma no le hará daño no puede evitar sentir algo de preocupación pues algo se siente diferente.
Abre la puerta encontrándose con Yeol que le sonríe débilmente y apunta con sus ojos al rosario de madera que cuelga de la pared.
—Tomalo —pide sin quitar su sonrisa.
—¿De qué hablas? ¿Es tuyo?— cuestiona acercándose al adorno.
—No, ahora es tuyo— asegura soltando un suspiro— también quiero verte y quiero acompañarte, mientras lo tengas estaré contigo.
—¿No vas a poseerme o algo raro, cierto? —bromea mirando fijamente el rosario.
—Eh, quiero entrar en ti pero no de esa manera.
—¿Qué mierda dices?-— cuestiona enojado tomando el rosario pero al buscar a Yeol no ve a nadie—¿ChanYeol? ¿Hola? No puedes escapar tan fácil.
No hay respuesta alguna del espectro, es algo común que se desvanezca de la nada pero por lo general aparece después de llamarlo. Con algo de inquietud toma el rosario entre sus manos y lo coloca cuidadosamente en su cuello esperando que algo suceda.
Pero no.
Con decepción sale de la biblioteca y camina a su casa, si bien siente algo de inquietud al dejar las cosas así con ChanYeol por primera vez siente algo diferente.
Y es que no se siente solo.
No es como que alguien lo siga para hacerle daño, solo, es una compañía amistosa por describirlo de alguna manera.
Entra a su casa esperando que su abuela ya duerma pues no le gusta que lo espere, se siente mal de hacerla descansar tan tarde.
Afortunadamente es así, ve que la recámara de su abuela está cerrada y se escucha el ruido de la televisión que sabe se trata de ella durmiendo ya que no puede dormir sin ese ruido.
Sube las escaleras y se apresura a ponerse algo cómodo para dormir.
Tal vez pueda grabar la obra y reproducirla en la biblioteca para ChanYeol, si es que ahora se digna a aparecer.
Ya con todo listo para dormir apaga las luces y se echa a la cama, se levantara temprano para alistarse e irá a ver a Yeol al terminar, puede que mañana no trabaje pero no quiere esperar demasiado.
Siente el rosario entre sus dedos, acaricia la madera delicadamente y sonríe al recordar lo que significa para él conservarlo.
"Mientras lo tengas estaré contigo"
—Buenas noches ChanYeol.
—Buenas noches KyungSoo, linda casa por cierto.
—¡Mierda no de nuevo!-— grita Soo levantándose rápidamente para encender la luz y ve a Yeol sonriente acostado en su cama— ¿porque haces eso?
—Que mal tratas a tus invitados— se burla levantándose también para observar por la ventana— siempre había visto a las personas pasearse por esa calle, al hacerlo yo se sintió muy bien, no creí volver a hacerlo.
Soo con la guardia baja nota como Yeol hace lo que suele hacer en la bodega: solo observar tras el cristal las pocas personas que pasan por la calle.
Se acerca a hacerle compañía, no cree que este momento lo tenga que pasar solo después de todo.
—Gracias por acompañarme —susurra Soo sin dejar de mirar por la ventana.
Siente cómo su mano es atrapada delicadamente por la de Yeol, esa fría sensación envuelve su cuerpo pero no le molesta.
Gira el rostro levemente y observa el rostro de Yeol de perfil ya que este no deja de mirar al exterior, aunque logra sentir como afianza su agarre con el pasar de los segundos.
—Gracias a ti por traerme.
