11

127 27 18
                                    

KyungSoo camina con una canasta llena de algunos panes que preparó desde la noche, piensa que ya que tiene que visitar su antigua casa no puede llegar con las manos vacías.

Intenta estar preparado para lo que tienen que decirle, después de todo el que su padre estuviera en su actual hogar no puede ser una coincidencia, sabe que algo ocurre.

Una vez llega suspira fuertemente antes de llamar a la puerta, tienen que llenarse de valor y la paciencia necesaria para no explotar con algún comentario fuera de lugar que de seguro tendrán con él.

──KyungSoo, que bueno que pudiste venir ──saluda JongDae abriendo la puerta— Pudiste haber entrado, tienes tu llave, sigue siendo tu casa.

──Estoy bien así, prefiero no invadir su privacidad ──menciona entrando cuando su hermano se hace a un lado.

No ha cambiado nada.

Los muebles siguen siendo los mismos así como el color de las paredes, supone que no han hecho un esfuerzo en actualizar su forma de vivir y no sabe si eso es bueno o no.

──KyungSoo, es verdad que vendrías ──saluda un hombre bajando las escaleras── JongDae me dijo que lo harías pero no estaba seguro si harías caso a su invitación.

──Hola ──saluda incomodo con el ambiente— solo quieren hablar, supongo, les traje algo.

──Gracias, pondré algo de té, ¿O prefieres chocolate? ── ofrece tomando el regalo.

──No, está bien es para ustedes, solo pasé rápido así que espero que puedan decirme que es tan urgente ──pide intentando no sonar tan rudo.

Solo quiere irse ya.

──Claro, pasa a sentarte ──invita su padre señalando los viejos sillones y el menor accede a tomar asiento.

Tiene una extraña sensación de que algo saldrá mal, sus manos sudan demasiado por lo que se seca constantemente con la tela de su pantalón.

──Entonces, hijo ──continua su padre cuando se sienta también— hace unos días fui a verte pero tu abuela no quería que lo hiciera, he intentado respetar tu decisión de no vivir con nosotros pero no te hubiera buscado sino fuera importante tu intervención.

──¿Qué ocurre? ¿Están bien?

──Sí, es decir nosotros sí ──aclara antes de continuar── pero, verás, el viejo pastor...

──¿Todo se trata de él? ──interrumpe molesto── no quiero verlo.

──Él está gravemente enfermo ──informa el hombre de golpe── todo parece apuntar que no le queda mucho tiempo con vida, está en su casa recibiendo ayuda médica pero siendo realistas no pueden hacer mucho por él.

KyungSoo se queda callado al escuchar tal noticia porque no sabe como sentirse, le gustaría sentir algo de pena como lo haría por cualquier otra persona.

Pero no puede.

──¿Y eso que tiene que ver conmigo?

──Me gustaría que hablaras con él para darle paz, si le pides perdón por todo el escándalo que provocaste por aquel mal entendido estoy seguro que podrá descansar en paz, también lo hago por ti, no querrás que un buen hombre se vaya con esas acusaciones, tú también estarás tranquilo.

KyungSoo no puede creer todo lo que escucha, hace años que decidió hablar del daño que ese hombre que hoy está al filo de la muerte y lo sigue persiguiendo.

Esperaba tener apoyo de su familia, tomar de ellos la fuerza necesaria para enfrentarse a sus demonios.

Pero solo ha obtenido esto.

ChanSoo: Amor en morse.Where stories live. Discover now