𝑫𝒆𝒔𝒕𝒊𝒏𝒂𝒅𝒐𝒔 𝒂 𝒂𝒎𝒂𝒓

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Ya ha pasado una semana desde que celebré mi cumpleaños y Rex por fin fue "bautizado".

Durante esa semana he hecho un mogollón de cosas con Rex: le he dado su primer baño, le he comprado su camita, le he llevado a la playa, hemos ido a un parque de perros, le he llevado a una tienda animal para pesarle y que escogiera sus juguetes, también le compré un hueso que todavía sigue mordidendo, y muchas más cosas.

Quise hacer más cosas con él pero, debido a los estudios de la universidad no tuve más tiempo.

Mis padres también se han ido de viaje de trabajo y me tengo que quedar a cargo de la casa durante unas semanillas.

Así que, bueno, ahí vamos.

Hoy es s
ábado y he quedado con Jayden en la playa por la tarde, justo a esa hora en la que el sol se va y se puede ver un precioso atardecer. Romántico ¿verdad?

Me acuerdo muy bien de cuando empezamos a hacer esas quedadas al atardecer, no éramos más que unos críos inmaduros, ja, que buenos tiempos...

Fue el dia en el que nos dimos nuestro primer beso cuando surgió esto de las quedadas en la playa.

Supongo que pasó algo mágico que hizo que Jayden no quisiera olvidarse nunca de ese momento.

Desde entonces se ha vuelto una costumbre vernos todos los finales de mes en la playa.

Cómo iba diciendo, hoy es Sábado, son las 9 de la mañana y estoy en mi habitación leyendo un libro de Alice Kellen.

El libro se llama: "El día que dejó de nevar en Alaska" , es un libro precioso, fue el primer libro que leí cuando entré a todo esto de los libro juveniles cuando era pequeña, a los 13 años.

Estoy jugetando con el marcapáginas, que por cierto, me lo regaló Jayden en nuestro primer aniversario del primer mes, mientras leo concentradamente el libro.

Solo quedan unas hojas para acabarme el libro y eso me estresa.

No me gustan los finales, sean buenos o malos, el hecho de que se acabe la historia no me gusta.

Yo siempre he sido de esas personas que vive los libros, por eso cuando llegó al final siento un pequeño vacío.

De todas formas siempre acabo encontrando otro libro y el ciclo se repite una y otra vez.

Ya solo me queda una página para acabar el libro justo cuando una piedra rebota en el cristal de mi ventana haciendo un clink insoportable.

Cierro el libro de mala gana y me asomó por la ventana. Lydia.

Ella me dirige una mirada burlona y se pone a gesticular de forma exagerada y a decir cosas que no puedo escuchar del todo bien.

Ruedo los ojos, divertida y abro la ventana para encontrarme con mi prima gritando cosas:

- Oh, Rapunzel, suelta tu pelo- dice exageradamente. Yo cogo una goma que está prácticamente destrozada y se la tiro para que pare porque me está poniendo en evidencia delante todo el vecindario haciendo que me ponga roja de la vergüenza.

-¡Cállate! ¡Que pareces una urraca, gilipollas!- digo riendo. Ella suelta una risa.

- Vale, pues baja aquí Rapunzel, y así puedo ver tu precioso pelo- dice burlona.

Yo pongo los ojos en blanco y voy al zapatero para coger una deportivas y atarmelas.

Bajo las escaleras y voy hacia la puerta.

Abro la puerta y me encuentro a mi prima con unas bolsas.

- ¡Déjame pasar!¡Que hoy toca spa!- dice divertida empujandome a un lado.

Yo suelto una risa y cierro la puerta.

Lydia deja las bolsas en la encimera de la cocina. Después se apoya también en la encimera y se inclina poniéndose la mano en la cadera.

- ¡Primita!¡Adivina qué!

- ¿Qué pasa?

- ¡Tengo novio!- dice con entusiasmo.

Yo pongo una expresión de sorpresa.

Lydia ha tenido muchos novios durante toda su vida y todos le han fallado, supongo que por eso mi cara no está tan alegre como debería.

- ¡Que bien!- digo intentando ocultar la incredulidad en mi rostro.

Mi prima pasa de tener una expresión entusiasta a poner una cara de paciencia.

- Te conozco demasiado bien Evelyn Miller, se lo que estás pensando, ¡y no! Este no me va a fallar, estoy segura.

- Lydia...

- Chsss, no me va a fallar ¿vale?, es una corazonada.

- ¿Una corazonada?- digo conteniendo la risa.

- No te rías- dice Lydia seria, yo aún así echo a reír como una loca mientras me tapo la barriga.

Mi prima me tira una mirada fulminante y yo sigo riéndome.

- Para- dice seria, yo intento parar pero se me es imposible.

Ella me saca ambos dedos con toda su ímpetu.

Yo, que ya estaba empezando a parar de reír, vuelvo a lanzar una carcajada tambaleándome.

- Vale, vale, ya paro- digo quitandome una lágrima de la mejilla.

- Por fin- dice Lydia aliviada.

- Bien, ¿que llevas en esa bolsa que ha hecho que tenga que dejar mi libro por LA ÚLTIMA PÁGINA?- digo exageradamente.

- Tranquila su majestad, el contenido de esta bolsa es de primera calidad, se lo aseguro.

- Vale, vale, pero dime ya

- ¡Que si! Impaciente, ven- dice Lydia, yo me acerco a la encimera y espero a que mi prima me diga algo.

-Eres libre de mirar- dice, yo sonrió y empiezo a cotillear las bolsas.

Hay muchísimas cosas dentro de la primera bolsa: sobres de mascarillas para la cara, artilugios de masaje bastante extraños, lociones, toallas, cremas...Un mogollón de cosas.

La segunda bolsa no es muy diferente a la primera, todo lleno hasta arriba de cosas de spa, bastante maquillaje nuevo, etc.

No pude evitar contener una risita divertida y mirar feliz a mi prima.

Ella me dirige una sonrisa honesta.

- Estás hasta arriba de trabajo de la uni y estos días te he visto muy estresada, por eso pensaba que necesitarías esto- dice Lydia con un tono tierno que me hace sonreír con dulzura.

- Además, tenemos una noticia que celebrar ¿cierto?- me rio y miro alegre a mi prima

- No creo que el hecho de que tengas novio es algo que deba celebrarse pero bueno, cualquier cosa por mi prima, ¿primas Miller para siempre?- Lydia sonríe y suelta una risa.

- Primas Miller para siempre- dice cogiendome de la mano y dandome un apretón.

- Vale, vamos a ello, ¡empezaremos por las mascarillas!- dice Lydia soltando mi mano y yendo con las bolsas corriendo al piso de arriba.

Suelto una risa y voy detrás de ella para que no se le caiga nada.

Holaa 🍓

Espero que os guste la historia 🤍💫

Tengo planes MUUUUY románticos para este libro 😜

Quedaos hasta el final y ya veréis🍍

Y una vez más...

¡Gracias por leer mis historias! 🌿💙