-Que?-cuestione.-
-Recuerdo cuando deje que tu padre se quedará dos semanas en mi casa- recordó mientras miraba el techo- Yo estaba tan feliz... ¿Que adolescente no quiere que su mejor amigo conviva con el unos días? Tendrían que haber sido las mejores fechas! Pero en cambio... tres días después de su llegada me confeso que salía con mi hermana, el sabía que yo era un celoso compulsivo así que fue con ella a decírmelo...¡Aún me dan náuseas recordar la manera en la que se tomaron las manos cuando llegaron a mi habitación para explicármelo! Lo peor es que ella estaba de su lado...siempre estaba de su lado, por lo que no me quedo más remedio que aceptar esa relación y ver como mantenían una feliz vida juntos, asistir a su boda y aceptar ser el padrino de uno de sus hijos- volvió a mirarme- Y ahora el momento de la venganza llego- tomo de la mesa una jeringa y se acercó a mi. Con tan sólo ver el tamaño de aquella aguja volvieron a darme ganas de desvanecerme, la acerco a mi brazo que se encontraba en la posición perfecta para inyectar algo...-
-Que es eso?- pregunte alterandome, el no respondió. Comencé a moverme sobre la silla, tratando de safarme de las cuerdas.-
-Que es eso?- volví a interrogar.-
-Sustancia psicotropica ya conoces como es el tema, has tenido este líquido en tu sangre demasiado tiempo- sonrió malévolamente.-
-No. por favor no!- el sólo río. Mis intentos por escapar fueron inútiles, cuando toda la fe en mi se había ido y cerré con fuerza los ojos esperando que la aguja se inserté en la apenas visible vena de mi brazo, una voz grito.-
-ALTO AHÍ, POLICÍA!- abrí los ojos y divise a dos guardias detrás de Nino, en las pocas milésimas de segundo que me tomo despegar mis párpados, mi tío aprovecho y me inyecto aquel líquido cumpliendo así con su objetivo.
Dejo caer la jeringa al suelo y levanto las manos girando se hacía los policías, en donde se habían comenzado a escuchar la llegada de más policías con la sirena de sus autos encendida. Un guardia me ayudo a desatare mientras yo no dejaba de mirar el lugar donde Nino había inyectado la sustancia psicotropica.-
-Estas bien?- pregunto serio el hombre.-
-Si,si- respondí volviendo a la realidad. ¿Cómo había llegado aquí la policía? La pregunta a esa pregunta apareció por la puerta corriendo hacia mi. Alan y Alonso llegaron agitados a mi lado, al parecer por culpa de la maratón que acababan de correr. Lo sorprendente fue que ambos me fulminaron con la mirada antes de empezar a hablar.-
-ESTAS LOCA O QUE TE PASA?! COLO TE VAS A MANDAR ASÍ, SOLA,SIN DECÍRSELO A NADIE?! EN DÓNDE TENÍAS LA CABEZA CUABDO VINISTE SOLA A ENCONTRARTE CON ESTE LOCO?!- gritaron los 2 al mismo tiempo atropellados y ahogando la palabra del otro. Observe por unos instantes a los dos chicos parados frente a mi sermoneandome, los amaba a los dos. Y recordé la historia que Nino me había contado... Alonso sería incapaz de hacer algo así...mi hermano no es un psicópata.
Sonríe y los abrace, rodeando con un brazo el cuello de uno y con el otro brazo el cuello del otro.-
-A mi también me alegra verlos- anuncie para que pararan de gritarme y dejarán su enojo de lado y se dieran cuenta que lo más importante era que yo estaba bien, borre la sonrisa de inmediato y me separe de ellos recordando que en realidad, mi tío si había cumplido su tarea y la sustancia corría por mis venas.-
-Estas bien?- pregunto Alan tomándome de los brazos.-
-Necesito extraerla- conteste, pero hablando para mi misma.-
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Bueno chicas pues a quién les recordó la historia que le contó Nino a ______?
Bueno pues gracias por leer ❤️
Y como todo comienzo tiene un final les informo que a la novela sólo le restan dos capítulos para que llegue a su fin. 😭
