Su centro. Su pilar. El motivo por el que Taehyung seguía viviendo y no cayó en una profunda depresión que pudo haber acabado con su muerte, como dijo en esa carta que le dejó a Seokjin.


Jungkook es lo único bueno que he hecho en esta vida y si él llega a morir, Seokjin, yo también me muero.


―Te ama tanto que pensé varias veces en lanzarte por la ventana para deshacerme de ti y que me amara sólo a mí ―agregó Seokjin como si nada.


Jungkook lo miró, parpadeando debido a la incredulidad.


―¿Estás bromeando, papá? ―preguntó.

Seokjin sonrió.


―Por supuesto que no.


Decidió no seguir investigando sobre eso.

―¿Mamá llegó a amarlo?


El rostro de Seokjin se tornó meditabundo.

―No ―dijo con rotundidad―, no creo que haya sentido amor por él. Taehyung fue criado para buscar seguridad y sonreír ante un alfa, por eso permitía los golpes y abusos. Incluso, muchas veces conmigo, se comportaba como un omega sumiso y complaciente, porque lo criaron para no tener voz ni voto. Sólo cuando tú estabas realmente amenazado, él parecía reaccionar de otra forma ―hizo una mueca de diversión―. Cuando le propuse matrimonio, se negó al principio porque no iba a sacrificarte, e incluso cuando le prometí que no te haría daño, fue desconfiado y trató de satisfacerme para que yo siempre estuviera feliz.


Jungkook trató de imaginárselo, trató de pensar en el mismo rostro que vio en televisión, más joven, forzándose a sobrevivir cuando la vida le dio tantos golpes, y comprendió el desprecio que sentía Taehyung hacía los alfas, el por qué habló de ellos con tanto ira en su voz.


Entonces, un pensamiento desagradable entró a su mente.


Si yo soy alfa, ¿él también va a odiarme?


Taehyung no sabía que él era alfa. Hasta el momento, todo el mundo lo veía y pensaba que era omega por su aspecto, y sabía que cuando era más pequeño, todos esperaban lo mismo de él. Incluso en la carta de su cumpleaños número doce, cuando se reveló como alfa, Taehyung le comentaba lo feliz que estaba que ahora fuera omega, a pesar de lo difícil que sería su vida.


Jungkook no creía poder vivir si su mamá le decía que no lo quería porque era alfa.


―¿Él te amaba, papá? ―preguntó con voz ahogada, recordando los ojos llenos de amor que Taehyung tenía en el vídeo.


Seokjin trató de ocultar su mirada llena de dolor.


―Por supuesto que sí ―dijo con voz temblorosa―, me amaba tanto como lo amo yo.


Jungkook miró a su papá, siendo consciente de que habló en tiempo pasado, y temió por un instante que, a pesar de que Taehyung hablara con tanto amor en sus cartas, puede que las cosas fueran distintas una vez se vieran.


Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Yuanfen [JinTae] Adaptación Where stories live. Discover now