Make it feel like home [L.S]

5.

Llegaron a la puerta de la casa y tocaron el timbre, Lizeth y Michael, los papás de la pequeña lizzy, abrieron la puerta con cansancio en sus ojos, pero fingiendo una sonrisa, Louis se pudo dar cuenta de los pequeños signos de que Liz estuvo llorando pero decidió no decir nada al respecto.

— Hola, hola, llegamos con helados para la mejor nadadora y los papás de la mejor nadadora, ¿verdad Abby? - dijo Louis fingiendo emoción, abrazándolos un poco más fuerte que de costumbre, haciéndoles saber en silencio que podían contar con él, Abigail asintió emocionada.

— ¡¡Sii!! Y también le compramos una Ariel, miren, ahora podemos estar iguales porque yo tengo una igual y compramos una Amber como la de ella para que seamos gemelas - Abigail enseñó emocionada las muñecas que Louis compró, mientras a Liz y Michael se les derretía el corazón de ternura.

— ¡Hey Abby y Louis! Gracias, pero no tenían por qué.. - empezó a hablar Michael, pero Louis interrumpió suavemente siendo más rápido.

— Oh, no se preocupen, la única condición es que los acepten, o en caso contrario, tendremos que entrar a la fuerza y tendrán que atraparnos - Louis entró a la casa sin esperar con una mirada juguetona levantando a Abby en sus brazos haciendo reír a su pequeña y a sus dos amigos, corriendo hacia la habitación de Lizzy, sabía que en estos momentos ellos necesitaban eliminar sus preocupaciones, así que trataba de ser más divertido.

Cuando llegaron a la habitación de Lizzy todos bajaron el ritmo y se tranquilizaron, Louis abrió la puerta con una sonrisa gigante — ¡Hola pequeñita! ¿adivina quien llegó? Pista: es tu tío favorito con tu hermanita favorita - Louis siempre intentaba con todas sus fuerzas intentar sacarle una sonrisa a Lizzy con su "positividad" y casi siempre lo lograba.

— Hola tío Lou y Abby - Lizzy sonrió débilmente mirando a su "tío" y a su "hermanita" con amor y admiración recostada desde su cama.

— ¡Trajimos helado para ti, Lizzy! - Abby se sentó al lado de Elizabeth con toda la confianza del mundo - Y también compramos una Ariel para ti igual a la mía y una Amber para mi igual a la tuya, así podemos ser gemelas porque tenemos las mismas - empezó a dejar todo en la cama, al lado de Lizzy para que lo pudiera tomar mientras Louis ayudaba a la pequeña a sentarse.

— ¡Gracias! - empezó Lizzy mirando a sus papás con una sonrisa y una lágrima escapando de sus ojitos.

— Oh no, amor, no llores - Louis se acercó rápidamente a la pequeña limpiando sus lagrimitas de sus dos mejillas, para después rodearla con sus brazos, abrazándola lo suficientemente fuertemente para hacerle sentir su amor, pero a la vez siendo cuidadoso para no lastimarla.

— No llores Lizzy, no me gusta verte triste, ¿no te gustó Ariel? ¿Querías otra, verdad? Papi, debimos comprarle a Rapunzel, pero no te preocupes Lizzy, la podemos cambiar, papi vamos.. - Abigail habló rápidamente tratando de encontrar una solución para que Lizzy no llorara acariciando su cabello con sus pequeñas manos y levantándose inmediatamente de la cama de Lizzy, tomando a Louis de la mano para volver a la tienda y cambiar la muñeca.

— ¡No Abby! Si me gustó mucho, quiero ser gemela contigo, gracias - Lizzy detuvo a Abby tomándola suavemente de la mano para impedir que se vayan.

Los tres adultos sonrieron con la escena y salieron a la sala para platicar después de dejar un beso en la frente de las dos pequeñas y dejarlas jugando en la habitación de Lizzy.

LOUIS, LIZETH Y MICHAEL

Llegando a la sala, se sientan en un sofá cada uno y Michael empieza a hablar mostrando su agradecimiento — Muchas gracias Louis, de verdad, no sabemos como agradecerte toda tu amabilidad con Lizzy.