Capítulo 24: This is the end of everything

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-Sobrevive...

Escalofríos y un enorme miedo recorrió su espina dorsal a todo el cuerpo, tal palabra amenazaba descompensarlo a tal punto que parecía que enloquecería... ¿acaso era tan malo en realidad la situación en la que estaba metido...?

- ¡¿A qué demonios te refieres con "sobrevive"?! -preguntó alarmado

-Perdón por desalentarte así pero es la verdad...

- ¿T-tan malo en realidad es la situación...?

Por un rato escuchó estática en la conexión telepática entre ambos, poniéndolo peor de lo que ya estaba, sentía la mirada de miedo de Helena clavándole en la nuca, presionándolo más, la estática desapareció, lo que escucharía lo desalentó...

-Solo sobrevive o muere en el intento...

El mundo pareció detenerse y colapsar, esas dos pesadillas nuevamente se cruzaron por su mente, su corazón retumbaba furioso contra su pecho, haciendo que su cabeza palpitara con fuerza, sintiendo algo de mareo por lo que había escuchado... ¿En realidad todo eso estaba pasando o solo estaba soñando? O mejor dicho ¿Acaso era real o solo estaba dentro de una pesadilla del que no podía escapar?

-Oh, parece que tienes algo de miedo, principito... -dijo la demonio con falsa dulzura

Los nervios se le pusieron de punta, haciendo que se tensara y atendiera cualquier tipo de movimiento proveniente de Beldam, su cuerpo temblaba ligeramente, los botones negros que fijamente lo miraban a los ojos azules lo ponían demasiado paranoico, rápidamente desapareció para reaparecer en el mismo lugar, hizo el intento de teletransportarse varias veces, pero el resultado era el mismo: aparecer donde estaba parado...

-Querido, déjame decirte que nadie entra o sale de aquí -dijo Beldam -, vive o muere, la niña no entrará bajo ninguna circunstancia y tú... - enfatizó, tomó una pausa, sonrió ampliamente, con toda malicia siguió -: no saldrás y vas a morir aquí...

Su rostro se puso blanco como la leche al escuchar lo dicho, rápidamente fue hacia donde estaba Alice, casi chocando contra la barrera invisible, un rostro de shock estaba dibujado en ella, mientras que él sudaba copiosamente, junto una cara de angustia profunda...

-Ayúdame Al... -dijo colocando su mano contra el domo -por favor...

La joven salió de su estado de sorpresa, miró a todos lados intentando pensar en algo, pero solo se le estaba ocurriendo una sola cosa...

-Golpea con todas tus fuerzas.

- ¡¿Ese es tu plan?! -preguntó alarmado

- ¡No se me ocurre otra cosa Martin!

Ya sin ganas de discutir, iban a disponerse a destruir la barrera con fuerza bruta, pero antes de que pudieran comenzar, los ojos de Alice se ampliaron como platos, casi saliendo de sus órbitas, se pudo apreciar que éstos se pusieron cristalinos por aparentemente lágrimas, haciendo que saltara hacia atrás y mirara con terror hacia algo, los ojos de Chris se ampliaron en sorpresa, en cuanto iba a mirar hacia atrás, recibió un arañazo en la cara, lanzándolo lejos, una larga línea recorría su mejilla, del cual brotaba sangre. En sí el corte le dolía y picaba, por más fino que haya podido ser... debía cuidarse...

-Tu sangre... es tan pura...tan dulce... -dijo ella relamiéndose el dedo con el cual le causó el corte, lo más tétrico era que lo había dicho como si estuviera deleitándose con la sustancia carmesí que lentamente caía en hilillos sobre su dedo -me encanta... me emociona saborear esto... me excita... quiero más...

No es otra típica historia de tu vecino (Chris Martin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora