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"Buenos días a todos", saludó Chabashira-sensei, con su habitual cara de póquer.
De pie detrás del podio, Chabashira-sensei escaneó a toda la clase.
"Jehhh... Mírense, sentados erguidos con expresiones tan serias. Ya están actuando como estudiantes dignos de la Clase A". Chabashira-sensei nos estaba elogiando, pero su tono sarcástico dejó en claro que en realidad se estaban burlando de nosotros.
"Los superiores se sorprendieron mucho cuando informé lo que pasó ayer, ¿sabes? Si alguno de los otros asesores de la clase se entera de ustedes, seguramente se volverán cautelosos". El tono de Chabashira-sensei bajó repentinamente. "También estoy bajo investigación en este momento. Como pueden ver, siempre existe la posibilidad de que haya compartido voluntariamente esa información con ustedes. Estas acciones van estrictamente en contra de las reglas y podrían hacer que me despidan en el acto. Sin embargo, una vez que revisen todas las pruebas, estoy segura de que estaremos bien".
Pruebas, ¿eh? Supongo que son las cámaras de seguridad que están esparcidas por las paredes del aula. No están especialmente ocultos, pero no creo que todos los hayan notado todavía.
"Sensei." Hirata levantó la mano.
"¿Sí, Hirata?" Chabashira-sensei le dio una mirada de reojo.
"¿Está bien que nos digas estas cosas?" preguntó Hirata.
"Por supuesto. No cometería el error de compartir información confidencial, incluso si es para el beneficio de mi propia clase. Al final del día, las reglas son reglas". Chabashira-sensei respondió suavemente.
"Bueno, dicho esto, tengo otra cosa que aclarar". Con sus manos pegadas al podio, Chabashira-sensei parecía una finura bastante autoritaria. "Hubo un detalle sobre el S-System que omití ayer... No, es más apropiado decir que mentí completamente al respecto".
La mirada rígida en los rostros de mis compañeros de clase se volvió más rígida.
"En realidad, existe otra forma de ganar puntos de clase además de los exámenes especiales". Dijo Chabashira-sensei.
"-?!" Toda la clase reaccionó un poco violentamente, pero no pronunciaron ninguna palabra. Sólo tomó un segundo antes de que se calmaran nuevamente.
"¿Qué pasa con esas miradas? Los exámenes especiales ya son la guinda del pastel. Este no es nada revolucionario ni único, en realidad". Chabashira-sensei comentó con una sonrisa. "Como cualquier escuela preparatoria normal, tendremos exámenes parciales y finales. Dependiendo de tu desempeño, puedes ganar hasta 100 puntos de clase".
"Eso es bastante..." murmuraron algunos de mis compañeros.
"No se pongan demasiado feliz ahora. Si obtienes una puntuación alta en su examen, eso está muy bien, pero si alguno de ustedes falla... entonces ese estudiante será expulsado inmediatamente." Chabashira-sensei no sonrió esta vez.
