Bienvenida a Hogwarts

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Emily:

– Mamá es necesario que lleve este suéter..?

Trataba de acomodar el gran suéter que mamá tejió para mí, pero era muy grande, fácilmente cabían dos yo.

– Mi niña crece tan rápido

Dijo mi madre sin siquiera responder la pregunta que le había hecho antes.

Suspiré con pesadez, mamá me abrazó mientras yo pedía ayuda a mis hermanos con una mirada suplicante, los cuales se reían de mí.

– Fred, ayuda a tu hermana con su maleta

Dijo mi madre mirando a George.

– Soy George, no Fred, en serio mujer, ¿Y te haces llamar nuestra madre?

Rei por lo bajo era usual que mi madre los confundiera.

Después de un largo camino llegamos a Hogwarts, y vaya que era grande, demasiado grande diría yo.

– Bienvenida a Hogwarts Emi

Dijo ron dándome unas palmaditas en el hombro.

– No se te vaya a meter un mosca

Dijo fred cerrando mi boca, no tenía idea en qué momento la había abierto, solo mire como los gemelos  se alejaban riéndose de mi, ron tomó mi mano y me enseñó un poco de el lugar, para después llevarme al comedor.

Estaba nerviosa y Ron lo sabía perfectamente.

– Todo estará bien, solo pasarás y el sombrero seleccionador te dirá
"Oh eres una Weasley, eres de griffyndor, anda pasa con tus hermanos a comer pollo"

Me reí por su pésima imitación, y el solo me dedico una sonrisa.

– Solo relájate

Asentí ante las palabras de ron, para después irme con los demás, pasaron algunos minutos hasta que empezó la ceremonia.

– Emily Weasley

Escuché mi nombre y pase al frente para que el sombrero seleccionador me dijera en cuál casa estaría.

Mis hermanos me miraban con una sonrisa, mientras ron alzaba sus pulgares en señal de aprobación.

Al sentarme bajo el sombrero mire  a un chico rubio, el cual me miraba con curiosidad.

Mi mirada miró al frente nuevamente cuando el sombrero comenzó a hablar.

– Mmm… un futuro comprometedor, dónde te pondré en ravenclaw..?. No… tal vez en gryffindor cómo al resto de tus hermanos.

Los chicos solo me miraban con una sonrisa, mientras ron señalaba una pieza de pollo que estaba en la mesa.

Fueron los segundos más largos de mi vida hasta que el sombrero seleccionador habló nuevamente.

— Se dónde te pondré… Slytherin

Drásticamente los rostros de mis hermanos cambiaron, ellos se miraron entre sí, pude sentir como mi rostro se puso pálido ya que era la primera vez que un Weasley entraba a Slytherin.

Y ese Weasley era yo.

Al parecer no comería pollo con ron.

Me levanté y me dirigí a una de las bancas mientras aún seguía en shock por el acontecimiento.

No sabia que era peor, el suéter que me picaba por todo el cuerpo y para rematar me quedaba gigante o que haya quedado en Slytherin.

Supongo que la segunda.

Mis pensamientos estaban acabando conmigo, hasta que una voz me trajo de vuelta a la realidad.

–Hey tu Weasley

Gire en dirección a aquella voz, y solo mire como el mismo rubio que había visto anteriormente se acercaba a mi junto a otros dos chicos.

Genial más problemas.

Dije por lo bajo.

Mire a los tres chicos con atención.

– No puedo creer que hayan puesto a un Weasley aquí

Miraste confundida a aquel chico, mientras el rubio te miraba fijamente

– ¿Quieres una limosna Weasley?

Dijo el otro chico en tono burlón mirando mi suéter.

Mi molestia fue notoria, me levanté de mi lugar y me acerque al chico.

Estaba apunto de responderle y dejarlo en su lugar, menudo idiota quien se cree, la única que puede decir algo de los suéter de mamá soy yo.

Pero antes de que pudiera decir algo el rubio habló.

– Cállense

Miro a los chicos los cuales solo asintieron y dieron un paso atrás.

El rubio me miró nuevamente y yo enarque una ceja, esperando a que dijera algo.

– Soy Draco Malfoy, es nuevo tener a un Weasley aquí, así que disculpalos.

Le dedique una sonrisa sarcástica al chico, en eso escuchaste la voz de ron, el cual se acercaba a gran velocidad.

Más problemas.

Mi pensamiento fue automático.

– Déjala en paz malfoy

Dijo ron para después tomar mi mano, no sin antes sacarles el dedo de en medio a aquellos tarados.

Ron me  jaló fuera del comedor para después empezar a quejarse de todo lo que había pasado.

Sin siquiera dejarme hablar,
Ron me prohíbo hablar con malfoy.

No era como si fuera a hablarles a aquellos babosos.

La mayoría del tiempo me la pasaba con Fred, George, Ron, Hermione y Harry.

Hermonie era la única chica del grupito, con la cual tuve conexión al instante.

No creí que hablaría con alguno de mis "compañeros" hasta que conocí a Pansy, mi compañera de habitación ella era diferente en todos los sentidos, no compartimos el mismo pensamiento pero simplemente lo ignoraba, ella era amiga de malfoy a lo cual no le prestaba atención simplemente hablaba con ella y compartía la habitación.

El pollo sabe riquísimo.

– Si Emily, está es la quinta vez que lo dices

Es que es la verdad.

Seguí comiendo mientras Pansy se quejaba de los chicos que le caían mal.

– Oye deberías venir conmigo y malfoy, será entretenido.

¿Y estar con ese rubio oxigenado?
No gracias, yo paso.

La chica se encogió de hombros y se fue,
Yo me dispuse a seguir comiendo, hasta que George y Fred se sentaron frente a mi.

Mire a los dos chicos, para después mirar mi pollo.

¿Quieren pollo?

Pregunté con la boca llena.

– No hermanita, no queremos pollo.

Dijo fred mientras me daba una sonrisa de oreja a oreja.

– Queremos que nos acompañes.

Hablo George, los dos pelirrojos me tomaron de los hombros y me sacaron del comedor.

No esperen, aún no terminaba de comer.

– Ya tendrás tiempo para comer más pollo.

Puede escuchar a Fred, suspiré con pesadez y solo deje que me arrastrarán por medio Hogwarts.

El secreto de los Weasley Where stories live. Discover now