Memories •Derek Hale•

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Insatiable.

Los chicos estaban en la casa de Scott, esperando que la mama de Kira apareciera con los onis. ¿La razón? Para saber si Stiles era él en realidad, solo así era la forma de saberlo. Melissa fue a la habitación de su hijo para avisar que la madre de Kira ya habia llegado, y los tres bajaron las escaleras.

— Mamá por favor basta —dijo Kira llegando detrás de ella .— Lo unico que conseguirás es ser atravesado con una espada —se dirigió esta vez hacia Stiles.

— Yo fui el que pidió que viniera — contestó el chico.

— Ya esta hecho —dijo la mujer antes de que su hija la interrumpiera.

Del suelo comenzaron a salir unas sombras negras hasta ser convertidas en Onis, eran dos. Se acercaron rápidamente hacia el chico y uno de ellos colocó sus dedos detrás de la oreja mientras que el otro lo sujetaba, fueron unos escasos segundos hasta que retiró su mano y así como llegaron desaparecieron.

—Revisen su oreja.

Scott se agachó para ver a Stiles quien había caído al suelo y giró la cabeza de su amigo para lograr ver.

— Funcionó —dijo aliviado Scott.

— ¿De verdad soy yo? — cuestionó Stilinski.

— Más tú que nogitsune — respondió la madre de Kira.

—¿Los Onis lo pueden encontrar?

—Mañana por la noche, ya esta por amanecer.

—¿Lo pueden matar? — preguntó Stiles.

—Depende de que tan fuerte sea — respondió la Sra. Akimura.

—¿Por qué se llevaría a Jessica?

—Solo para tener ventaja.

—¿Por su poder?

—El poder de una banshee.

—¿Y por qué no Lydia? — debatió Scott.

—Debe ser porque tiene más experiencia o su poder debe ser mayor, no lo sé —dijo Stiles al borde de un colpaso por la situación.

Ambos amigos se quedaron mirando por unos segundos, casi como si estuvieran hablando con la mirada.

Una cosa tenían clara y era rescatar a Jessie.

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Jessica

Me encontraba en unos túneles que parecían no acabar nunca y yo solo quería salir del lugar, me sentía al borde de un colapso. Lo único que se y por lo que logro escuchar, es que hubo una matanza hace mucho tiempo en este lugar.

Mientras caminaba me iba aferrando a las tuberias y acercaba mi oído a ellas para escuchar las voces. Creí que estaba sola pero el sonido de unos pasos aproximándose me sacó del trance.

—Alejate —dije asustada.

Por más que quería correr no podía, las piernas no me acompañaban.

—¿Los escuchas? — preguntó acercándose .— es más fuerte de lo habitual porque muchas cosas malas pasaron por este lugar.

Comencé a caminar un poco más rápido por la cercanía que estabamos teniendo, gemí de la frustración y de la desesperación por salir de ahí.

— ¿Qué te dicen de Stiles? ¿Qué esta muriendo? —dijo burlesco .— Porque es cierto, esta muriendo.

—¿Para qué me necesitas? — pregunté.— No tengo como ayudarte.

A lo lejos vi una especie de reja, aceleré el paso hasta llegar a ellas pero estaba cerrada y la agite mientras gritaba.