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Tus gemidos habían conseguido despertar a König... pero horangi no pararía con su trabajo entre tus muslos T
u espalda se arqueó sobre la cama, con un fuerte gemido saliendo de tu garganta mientras alejabas su cabeza de entre tus piernas
Tus dedos se hundian el cabello negro de Horangi, tirando de él y empujándolo hacia afuera de tus caderas. Te retorciste y lloraste, su lengua estimulaba bruscamente tu clítoris y sus dedos se hundieron profundamente en tu interior
"¡mas lento!" Suplicas "¡Por favor!"
Su única respuesta fue empujar un tercer dedo hacia adentro, curvándolo hacia arriba, masajeaba tu punto G. Temblaste, chillando el no quiera acabar con su tortuoso placer, tus muslos se cerraron alrededor de su cabeza y las uñas tiraron de las raíces de su suave cabello.
Tu cuerpo se tensó, tu cabeza echada hacia atrás con un gemido agotado y porfin estallaste ,llenandolo de tu liquido. Horangi gimió, su boca dejó tu clítoris para lamer tu fluido, empujando su lengua dentro de ti Cuando se apartó, miró fijamente tu cuerpo tembloroso chupándose los dedos uno por uno, dándote una muestra de lo sexy y provocativo que podía ser.
"Aún tienes que estirarla mas por mí, Horangi", una voz más profunda vino destras de Horangi, una mano grande en su nuca y empujándolo hacia ti. "Weitergehen."
Obedeciendo el tono autoritario de König, Horangi se desabrochó el cinturón y suspiró cuando se bajó los calzoncillos. Arrodillándose en el borde de la cama, te agarró el tobillo y tiró de ti,haciéndote gritar. Se metió entre tus piernas, . Te susurró cosas dulces al oído, presionando besos en la piel sudorosa de tu cuello y hombros,dejando pequeñas mordidas
"¿Soportaras a König?... realmente quiero ver eso" Tu rostro enrojece con cada palabra
Tus manos agarraron sus antebrazos, Te acurrucabas contra él con cada embest ida, con cada palabra dulce que te murmuraba te mojabas mas. Sus apodos y sus sucios cumplidos te hicieron temblar. envolviste tus piernas alrededor de su cintura, mordiendo su oreja, pidiendo más,murmurando maldiciones mientras aceleraba su paso Pasaste las uñas por su espalda desnuda y él gimió de dolor y placer.
"Ven, Maus", la voz de König se escuchó a través de tus gemidos, su mano tranquilizadora acarició la parte superior de tu cabeza
Tu cuerpo reaccionó a su voz,a la voz de tu coronel y un espasmo casi orgasmico hizo que tus paredes se apretaran aldededor de Horangi Dejó escapar pequeños gemidos, su ritmo se volvió cada vez más torpe, sus manos agarraron tus caderas con fuerza, a trayéndote hacia él, tus pezones rosaban contra su pecho. Gritaste su nombre, te estremeciste cuando te corriste y Horangi no podia parar de decir cuando quiero llenarte Tembló, contra la piel de tu hombro. Horangi se hundió en ti para descansar sobre tus pechos,se había corrido
