#7 El barrio del placer

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N/A ¡¡Estoy sacando estos capítulos!! Este es un capítulo corto con un poco de lindo romance. Prepara el escenario, pero no esperes nada innovador. Fue más para mi disfrute que la trama, así que lo siento.

Hay tanta inspiración para seguir escribiendo. Estoy emocionado por lo que sigue. ¡¡A todos mis lectores, gracias por seguir con mi libro!! <3

*Pov Bell*

"Dije que iré contigo." Ais habló con fuerza.

"¿Pero por qué?" Yo le pregunte a ella. Ella tardó varios segundos antes de responder.

"Porque no te dejaré ir solo... especialmente a un lugar como ese."

Acepté su decisión entendiendo que no podía cambiar de opinión. Le expliqué el objetivo de mi misión pero nada más. Dejé fuera todo sobre Hades o el tesoro.

Decidí intentarlo una vez más "No es necesario que te vuelvas real".

"Yo... iré a cambiarme", me interrumpió. Ais no iba a escucharlo así que dejé el tema. Sin decir una palabra más, se dio la vuelta como si la decisión fuera definitiva.

"¡Ais le dije a la diosa que me iría mañana por la mañana!" Intenté decírselo, pero Ais negó con la cabeza sin hacer caso de mi declaración. Dejó de caminar y miró en mi dirección.

"Si buscas un determinado restaurante o pub, muchos sólo abren por la noche. Los carteles se iluminarán y será más fácil de encontrar".

Entendí. "Oh."

Entonces eso es todo ¿eh? Voy con Ais Wallenstein al barrio del placer... por la noche... solo.

Maldita sea.

*Tercera persona*

"¿Cómo se llegó a esto?" Bell gimió por dentro. Él y Ais redujeron la velocidad cuando la entrada del barrio del placer estaba más adelante. Una gran puerta de metal con un letrero de color púrpura brillante formaba el camino. Detrás de la entrada había hileras de edificios elegantes y numerosas mujeres hermosas. El olor no se parecía a ningún otro. Si la pasión fuera una sustancia física, sería este olor.

Ais estaba junto a él con un vestido negro. El atuendo la hacía parecer menos una guerrera y más una niña inocente. Resaltó sus ojos, convirtiéndola en un espectáculo digno de contemplar. El atuendo era muy poco característico en ella, pero el peli blanco decidió no comentar al respecto.

No pudo evitar mirarla sin pensar, así que trató de concentrarse en la misión. Los dos entraron al pueblo. Multitudes de personas corrían haciendo que el camino a seguir fuera difícil.

Esto, a su vez, hizo que Bell tomara su mano y la arrastrara. "Lo siento señorita Ais, pero es muy fácil separarse aquí". Se podía ver un más mínimo tono rosado en su rostro mientras la conducían.

La pareja dio vueltas y vueltas por el laberinto de calles concurridas. El espacio para caminar estaba estrecho entre edificios y personas. El cielo estaba oscuro, pero las luces brillaban generando luz más que suficiente.

"Echemos un vistazo a este bar. Tal vez podamos obtener alguna información sobre dónde está Crimson Lotus". Ais asintió y entraron.

La habitación era hermosa y estaba llena de mesas para parejas. Desde que se reconstruyó el barrio del placer tras el fallecimiento de Ishtar, la economía prosperó. Sin el gobierno opresivo de la Familia, los dueños de tiendas ya no estaban sujetos a impuestos y estrictas normas.

El suelo del bar consistía en una lujosa alfombra violeta con un encaje dorado que rodeaba las paredes. Había grandes candelabros de cristal colgando del techo y velas sobre cada una de las mesas de madera pulida.

Bell sonrió maravillado mientras observaba los alrededores. Un camarero se acercó y los condujo a una mesa. "Esto no es lo que esperaba", le dijo a la belleza rubia.

Ais no respondió mientras seguía mirando a su alrededor como una niña asombrada. Bell dejó escapar una pequeña sonrisa al ver a Ais disfrutar tanto. "Tal vez podamos buscar el loto carmesí mañana" le dijo con total confianza.

Ella lo miró y sus ojos preguntaron "¿Qué quieres decir?"

Bell sonrió. Sus preocupaciones y miedos desaparecieron en este momento. Al verla aquí, supo que aquí es exactamente donde quería estar. "Estoy diciendo que podemos disfrutar esta noche".

Bell imaginó a su abuelo riéndose a lo lejos mientras esperaba su respuesta. Ais escondió su rostro detrás de su cabello evitando la mirada de Bell. En voz muy baja, ella respondió "está bien..."

El camarero regresó con los menús y se los entregó a cada persona.

"¡Gracias por cenar con nosotros! Por favor, avíseme cuando esté listo". El camarero se fue tan rápido como llegó.

"Ais... este lugar es."

"Lo sé."

En hermosas letras en la parte superior de los menús se deletreaban dos palabras.

'Loto carmesí'

N/A Espero que hayas disfrutado un poco de este capítulo. Quizás estés pensando que fue demasiado fácil, pero todo lo que tengo que decir es...Que más al rato subiré el próximo cap estoy dándole los últimos detalles...Así que esperen con paciencia

No olviden comentar cualquier duda.y dejar tu estrellita

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