🤍── 𝙁𝙊𝙍 𝙔𝙊𝙐 🤍¡! 𝘓𝘦𝘦 𝘊𝘩𝘦𝘰𝘯𝘨𝘚𝘢𝘯 𝘼𝙊𝙐𝘼𝘿

──𝙀𝙞𝙜𝙝𝙩𝙚𝙚𝙣🤍

La luz del sol se comenzo a visualizar en el pequeño almacén donde se encontraban nuestros sobrevivientes, algunos ya se encontraban despiertos y otros dormidos. Min-ju seguía dormida recostando su cabeza en el hombro de Cheong-san

―¿Como es que Min-ju duerme tanto? ―pregunto Joon-yeong

―Siempre ha sido así desde que nacio. Ten cuidado de que no te babee Cheong-san, siempre lo hace conmigo ―respondio Min-ho con sus manos en los bolsillos del suéter

―No creo que lo haga ―dijo el pelinegro

―¿Y si la despertamos? ―pregunto Dae-su

―Si la despiertas, juro que te cuelgo con una cuerda en el techo ―hablo Min-ho mirando serio a Dae-su

―¡Vinieron los zombies! ―exclamo Su-hyeok y Min-ju ni se inmutó― ¡Min-ho se muere! ―exclamo y el mencionado rodo los ojos agarrando su arco y una flecha

―¡Min-ho y Ha-ri se están besando! ―exclamo Woo-jin, Ha-ri le dio un zape y Min-ho le apuntó para luego soltar la flecha la cual se clavo en una caja justo al lado de su cabeza, Ha-ri sonrió ladinamente mientras Woo-jin sintió que su corazón se detuvo

―Dije que se callen y dejen a mi hermana dormir en paz ―dijo Min-ho dejando su arco para volver a poner sus manos en sus bolsillos

―Tengo una idea, la voy a intentar bes... ―iba a hablar Su-hyeok

―Ni se te ocurra... ―respondio Cheong-san firme y serio y el castaño solo trago saliva

―Parecen unas guacamayas, dejen dormir ―murmuro Min-ju levantando su cabeza mientras frotaba sus ojos y buscaba sus mentas en sus bolsillos

A medida que pasaron los minutos todos se fueron despertando y comenzaron a hablar entre ellos. Min-ju y Cheong-san aún se encontraban sentados en el piso juntos hasta que Cheong-san habló

―Estuve pensando en toda la noche... ―hablo el pelinegro y Min-ju lo volteo a ver― ¿Que es lo que debo hacer? Como vivire... ―dijo y Min-ju bajo la cabeza y solto un pequeño suspiro para luego tocar la mano de su chico

―Hablemos de eso después ¿si? Mañana o pasado mañana o la próxima semana... Ya cuando todo esto acabe y comamos y nos demos una ducha, hablaremos hasta entonces ―hablo la ojiazul con una leve sonrisa

Cheong-san solo sonrió leve ante sus palabras, la amaba mucho y no soportaría que algo le pasará. El pelinegro solo se dedicó a asentir para luego mirar a la chica y hablar

―Te prometo que cuando salgamos... Te invitaré a una cita... Y te pediré que seas mi novia de una forma más formal... ―hablo el pelinegro para luego tocar la mejilla de su chica y dejar leves caricias en ella con su dedo pulgar― Pase lo que pase... No hay que rendirnos... Así como hubiese querido mi mamá... ―dijo y sin más se acercó a su chica para darle un tierno y cálido beso para luego separse y mirarla