Verano

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Trato de leer un rato, pero no puedo. Hace demasiado calor, así que abro la ventana y miro a ver qué se cuece en el barrio. Todo está tranquilo, demasiado para ser un viernes noche, ya que muchas familias se van de vacaciones.

Veo a Eric paseando solo por la calle. Fuma un pitillo mientras con la otra mano toquetea su teléfono móvil. Este chico es, con diferencia, el que peor me cae del instituto, y ya es mucho decir. Él nota la luz y mira hacia mí.

―Te vas a resfriar, Clarita―dice con una sonrisa en los labios.

Suspiro y me alejo de allí. Este tío es idiota. Me quedo parada al comprobar que llevo un escueto pijama y gruño enfadada.

Mi instituto es (o era, más bien) un centro elitista al que fue mi padre de joven y que, hasta ayer, había sido mi condena. Él venía de una familia rica, pero, al fallecer mis abuelos, no supo gestionar bien el dinero y lo perdimos casi todo. Le quedó lo justo para comprar la casa más modesta del barrio y abrir una pequeña gestoría en el centro que, afortunadamente, no iba nada mal. Mi madre, por su parte, nos abandonó cuando mi padre cayó en desgracia, y no quise tener más contacto con ella. No se lo merecía.

Cojo el móvil y cotilleo las redes. Estela, mi mejor amiga, ha puesto una foto de Cleo, su gata. Le doy like y sigo mirando. Stalkeo a Pablo, el primo de Estela y uno de los tíos más buenorros de mi instituto (aunque también va siempre con el palo metido donde no da el sol), y veo algunos vídeos de animales en TikTok.

Al cabo de un rato me canso y dejo el teléfono en la mesilla de noche.

Me tiendo en la cama, feliz. Estoy de vacaciones y, después del verano, empiezo la universidad. Decidí hacer la carrera de literatura, aunque a mi padre no le hizo demasiada gracia. Quería que siguiera sus pasos para así trabajar en la gestoría, pero no me gustaba nada la idea. A pesar de ello, me apoya en todo.

Estos meses los pasaré aquí, en Barcelona, disfrutando del sol y de la playa con los míos. Estela me ha prometido que tratará de convencer a Pablo para que venga con nosotras, cosa que me asegura tener buenas vistas durante el verano.

Me duermo pensando en los días que están por venir.

***

Me levanto con las mismas energías que un oso después de hibernar. Bajo a la cocina y veo a mi padre preparar un zumo de naranja. Ha hecho unos huevos revueltos y unas tostadas, costumbre que cogió de sus años de veraneo en Londres.

―Buenos días, luciérnaga.

―Buenos días, papá.

Luciérnaga. Aún ya estando en mis dieciocho, me encantaba ese mote cariñoso. Me lo puso de pequeña, ya que decía que yo daba luz a su vida. Al principio, éramos iguales. Los dos siempre sonrientes, felices, hasta que mi madre se marchó y llegó la oscuridad. Ahora, con los años, ya estábamos mejor, pero aún había días duros.

Nos despedimos y fui directa a ver a Estela, ya que habíamos quedado para dar una vuelta. Mi mejor amiga llega con una sonrisa y un nuevo arañazo en el brazo.

―Adivino, ¿has intentado bañar a Cleo otra vez?

―Fallaste ―contesta y me guiña un ojo―. Solo quería quitarle un momento su peluche para lavarlo.

Paseamos por uno de los parques más grandes de la ciudad. Hace mucho calor, así que estar bajo la protección de los árboles es todo un lujo.

―¿Crees que Pablo se apuntará?

―¿Acaso te gusta mi primo? ―Me mira, inquisitiva.

―No, solo es que está muy bueno ―contesto y le guiño un ojo.

―Para gustos...

Las dos reímos.

―Se lo dije ayer... Pero ha puesto una condición para venir...

―¿Cuál? ―pregunto, extrañada.

―Pues que irá con Eric a todos lados.

No. ¿Por qué, de todos los snobs del instituto, Eric era su mejor amigo? Entono los ojos. Es un mal menor, no le hago caso y ya está. Total, solo quiero que venga para recrearme la vista. Bueno, y si surge algo... Tampoco iba a decir que no, aunque para eso tendría que conocerlo mejor.

―Que venga. Cuantos más seamos, más reiremos.

―No esperaba esa respuesta.

―Bueno, se le ignora y ya.

Seguimos con nuestro paseo, planeando qué haremos durante el verano que, aunque aún no lo sabíamos, iba a cambiarlo todo.


A un paso de la lunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora