Siempre te he soñado

Capitulo 13. Tan solo como amigo..

- ¿Fred eres tu?!!!- oh nooooooooo!!!!!!!!

Si, esa misma es la rubia oxigenada de la novia de Chris... y viene corriendo a tirarse a los brazos de Fred.... De verdad!!!! Ganas no me faltan de cogerla de los pelos y arrastrarla por la sala... primero me saca a Chris y ahora se me reengancha en Fred? No señor.

Fred se deshace de su abrazo en un suspiro.

- Pero ¿que haces aquí? - le dice ella mirándolo con una sonrisa perfecta... (hasta los dientes los tiene perfectos...)

- Pues...

- Su padre y nosotros somos muy amigos, al fin se ha decidido a traer a la familia para conocerlos.. - interviene mi madre.

Fred le sonríe, creo que la “oxigenada” no sabe nada de como es la historia de la familia de él, y mi madre le ha salvado el culo.

- No nos habíamos vuelto a ver desde que llegamos al aeropuerto...- dice quejándose.

- Ya... estuve bastante liado.

- Familia ya estoy en casa- el sonoro saludo de mi padre, anunciando su llegada nos distrajo de la conversación idiota de Cloe y Fred.

Como siempre sus adorados hijos (en adorados hijos me incluyo a mi misma) saltamos a abrazarle hasta dejarle sin respiración. Luego me puse a ayudar a mi madre, mientras poco a poco se iban acomodando en sus asientos y mi padre junto con Jhon empezaban a ponerse al día.

Le ayudé a servir la mesa, y justamente me habían dejado un lugar al lado de Fred para sentarme. Me senté a comer (después de que mi madre me echara de la cocina, diciendo que no le hacía falta mi ayuda...)

- Tienes una familia muy grande... Chris me había hablado algo de vosotros, pero jamás me imaginé algo asi...

- ¿Algo así como?

- Tan cariñosos, tan atentos con todo el mundo... no se... Jamás puedes sentirte sola... siempre estás rodeada de personas que te aprecian.

- Tus padres se quieren mucho, se nota en como se miran...

- Me ha costado acostumbrarme a mi padre, estuve tantos años soñando con que apareciera... llegué a odiarle por no estar nunca a mi lado..

- Pero el no tenía culpa...

- Ahora lo se... - me dijo volviendo a sonreír.

- Seguro que te adora... ¿quien no lo haría?

- ¿Tu lo haces? - me preguntó divertido.

- Puede... - le dije haciéndome la interesante. - ¿Porque nunca has venido a casa?