—¿Hazel? —llamó su padre su nombre y Hazel salió de sus pensamientos para mirar a su padre. La reunión aún no había acabado y todos estaban allí en la sala de reuniones.

—¿Si? —preguntó.

El ceño de su padre se frunció, pero este fingió una sonrisa.

—El señor Tate ha hecho una pregunta y creo que eres el indicado para responderla —comentó su padre con su falsa sonrisa.

Hazel tragó nervioso sin entender y desvió la mirada hacia el señor Tate quien era el cliente de la reunión. Era un señor mayor de algunos sesenta años y se veía que era quisquilloso, podía notarlo por su expresión aburrida. Demonios. No había escuchado la pregunta de este porque había estado pensando en otras cosas y como nunca le preguntaban nada, no había prestado atención.

Volvió la mirada hacia su padre y decidió ser sincero, porque no iba a improvisar.

—Lo siento —se disculpó Hazel inclinando la cabeza hacia su padre—. Estaba pensando en algo de la universidad —mintió para que su padre no lo agobiara después y miró hacia el cliente—. ¿Me podría repetir la pregunta? —preguntó con cordialidad hacia el señor mayor quien sonrió ampliamente, cambiando completamente su semblante aburrido.

—Te pareces mucho a mi nieto, siempre enfocado en sus clases que a veces le digo que se tome un respiro —comentó el señor Tate sonriente y cambió a su semblante de negocios—. Quería saber qué maderas me recomiendan para elaborar gabinetes de lujo y que los mismos duren varios años —quiso saber el señor mayor y Hazel borró la sonrisa.

¿Por qué le hacía esa pregunta? ¿Era acaso una trampa? El señor debía de saber ya lo que quería, siempre venían con una lista de lo necesitaban y lo que buscaban era regatear los precios de las maderas que se ofrecían en la fábrica.

Hazel le devolvió la sonrisa, no obstante, aún pensaba en la respuesta. Aún se estaba empapando de las distintas maderas que se vendían y se usaban en la fábrica, pero la verdad es que no era un experto en la materia y tuvo que desviar la mirada a su padre para que este respondiera. Su padre frunció una vez más el ceño y se volvió hacia el cliente.

—La madera de Nogal es una de las maderas más duraderas y es utilizada para infinidad de usos —recomendó su padre con una amplia sonrisa—. Tiene un buen acabado y es bastante lujosa, quizás no es muy destacable como la caoba o el cedro, pero es bastante fácil para trabajar —respondió y Hazel hizo una mueca. Algo que recordó era que dicha madera decorativa era bastante cara y si el cliente buscaba buenos precios, Hazel dudaba que este aceptara ese tipo de madera tan cara.

—Pero es muy cara, ¿no? —replicó el cliente mirando hacia el de ventas quien sonrió con su característica sonrisa de sanguijuela.

—Sí, lo es, pero su acabado es excelente para el tipo de muebles que necesita —mencionó el encargado de ventas sin dejar atrás su sonrisa—. Otra cosa es que podemos hacer los gabinetes que usted necesita sin tener que ir a otra empresa y saldría mucho más barato —sugirió buscando de que el cliente trabajará completo con ellos, ya que el mismo solo quería comprar las maderas e ir a trabajarlas en otro lugar, sin embargo, allí en la fábrica, además de venderlas, también hacían mobiliarios y otros tipos de elementos.

—Tengo entendido que la madera nogal es susceptible al ataque de algunos insectos —continuó el cliente replicando, pues este parecía saber de la manera por igual y no iba a dejar engañarse fácilmente.

—Como todas —intervino rápidamente su padre—, pero con una buena protección anti insectos, puede evitar que la misma se deteriore —sugirió convenciendo al cliente—. Y si es para ese uso que desea adquirirla, este tipo de madera es resistente a la putrefacción, lo cual le beneficiaria a usted, señor Tate —terminó diciendo tratando de convencerlo más quizás viéndose un poco intenso, pero así funcionaban los negocios.

🍂 Falling🍂[Four Seasons #3] - [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora