Bolita de papel 65 -FINAL-

2K 212 34
                                    

Bolita de papel 65

Me encontraba sentada bajo un gran árbol en una de las bancas del parque. Veía como algunos niños pasaban riéndose y jugando a cualquier cosa, mientras que yo no podía parar de llorar.

Se que debería de afrontar la realidad y superar que mi papá no va a volver a estar conmigo. Pero simplemente es muy complicado, porque comienzo a recordar todos los momentos que viví con el y lo extraño demasiado.

Quisiera estar con el.

Sentía que me veía como una de esas viejas amargadas con capas negras que sólo se la pasan sollozando y quejándose de la vida.
Me estaba comportando como una señora de 60 años, cuando apenas tenía 18 años. No podía haber caído tan bajo.

Luego comenzarían a salirme arrugas.

Solté un sollozo fuerte.
Además de sola, vieja.
Saqué un trapo de mi bolsa y limpié mis lágrimas con el.
Noté como algunas señoras pasaban cerca mío y me miraban asustadas, alejando a sus niños de mi. Puse mis ojos en blanco.

-¿Ashley Mac? - escuché una voz masculina, que me sorprendió por completo. Abrí mis ojos de golpe.

Oh Dios mío, tengo todo el maquillaje corrido.

Con el trapo me apresuré a limpiar toda mi cara, intentando dejarla impecable. Cuando sentí que ya no me encontraba tan mal, alcé mi rostro hacia el propietario de aquella voz.

-Jake Peters - susurré confundida al verlo. Aquel chico era uno de los más callados de toda mi clase, encima, nunca había hablado con el. Así que no tardé ni un segundo en deducir lo que quería -. Se que vienes a burlarte de mi, preguntándome cosas estúpidas, como por ejemplo, sí quedé en quiebra - tomé aire -, y para tu información: no, no quedé en quiebra. Mi padre me dejó una gran herencia, lo suficientemente grande como para mandarlos a callar a todos ustedes, que se burlan de mi -. Al parecer mis palabras no parecieron sorprenderlo del todo, ya que no se inmuto ni un poco. En realidad, una sonrisa de satisfacción se formó en sus labios, y después de varios segundos comenzó a negar.

¿Y a este que demonios le pasa?

Se acercó un poco a donde me encontraba sentada, y tomó asiento justo aún lado mío. Me giré hacia el para verlo mejor y alcé una de mis cejas. ¿Acaso lo que le había dicho no había sido suficiente como para que me dejara en paz?

-Sigues siendo una niña mimada, sabía que no debía de creerme eso de que te habías convertido en emo - dijo sin dejar atrás su sonrisa. Fruncí el ceño. Claro, los rumores vuelan, pero las cosas ciertas se estancan.

-No me digas así, me recuerdas a alguien, y - hice una corta pausa para tomar aire, debido a que se me dificultaba por el largo tiempo que llevaba llorando -, no me volví emo, simplemente... - pero Jake no me permitió acabar.

-Simplemente comenzaste a ver el mundo como en realidad es; feo, y horrible, lleno de malas personas, ¿no? -. Me sorprendí bastante al notar que parecía que el sabía leer mentes. Esto era extraño -. Lo sé, y, ¿a quién te recuerdo? - preguntó, a lo que yo decidí simplemente encogerme de hombros -. ¿No sabes? - volvió a preguntar y yo suspiré.

Claro que sé pero no quiero decírtelo.

Y como sí hubiera podido escuchar lo que acababa de pensar, dejó de mirarme y fijó su vista en los niños que se columpiaban divertidos. Así que yo decidí mirarlos también.
Se notaba que estaban divirtiéndose bastante, disfrutaban el aire, que en este momento yo odiaba, disfrutaban de todo el ruido que había, que en este momento a mi me molestaba, disfrutaban de cosas que yo en este momento, simplemente no podía llegar a valorar.

Bolitas de papelHikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin