TRAICIÓN

🕑|| Tu don

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Advertencia: mención de violación, violencia, sangre, etc

El vampiro agradeció ser Inmortal, porque estaba seguro de que si fuera humano habría tenido un infarto

Después de siglos de esperar a su compañera, luego de haber perdido toda esperanza en encontrarla. Había aparecido y no solo era un metamorfo que había encontrado a su impronta en otro vampiro, si no que también tenía un hijo con otro hombre. Estaba seguro de que el karma estaba cobrándose cada una de las cosas que hizo

—¿Hijo? —pregunto Aro incrédulo al escuchar tal confesión

—¿Quieren encerrarnos en este castillo? —pregunto Tatiana mirándolo con enojo

—¿No...? ¿Si...? ¿Tuviste un hijo con otro hombre?

—¿Como te atreves a querer encerrarnos aquí?

—¿Como es posible que tengas un hijo?

—Ni siquiera puedo aguantar a los Cullen por mucho tiempo y, ¿tú planeas que me quedé encerrada en esta morgue?

—¿De quién es?

—Chupa sangre sin cerebro

—No me importa, lo mataré

—Te voy a sacar la cabeza y la tendré como sobrero

—¿Donde está el maldito que te toco?

—Y no solo eso, también querían encerrar a Emily

—Ese niño y tú son míos —gruño con los ojos negros

Ninguno de los dos se podían entender, ambos empezaron hablar uno arriba del otro sin escucharse, y sin darse cuenta de que Bella se escapaba silenciosamente para ir a buscar a su otras amiga. Ambos amenazando y discutiendo sobre dos temas totalmente distintos, eso hasta que el tono de Aro fue subiendo mientras hablaba

—Si no controlas tu tono, lo haré yo y no te va a gustar —con un gruñido de la loba fue suficiente para que el vampiro se callara

—Perdóname querida, no volveré a levantarte la voz —se disculpo apenado antes de que ambos se quedarán en un silencio incómodo

—¿Por qué quieren encerrarnos en el castillo? —pregunto la rubia más calmada

—¿Qué? Nadie las va a encerrar — explicó el rey confundido

—Tu hermano no piensa lo mismo

—Caius es un vampiro muy temperamental querida, no piensa en lo que dice la mayoría de las veces. Solo está enojado

—Que bien, porque querer encerrarnos solo haría que los odiemos

—Creeme que lo tengo más que claro querida —Aro le sonrió comprensivo —¿Me puedes explicar cómo es que tuviste un hijo con otro hombre que no soy yo? —pregunto el vampiro

Tatiana apretó los labios fuertemente sin saber que responder, una de las tantas cosas que compartía con su hermano era el no decir sus problemas a nadie. Por más pequeño que sea siempre se quedó callada o hablaba con su hermano. Por eso no sabía que decirle al vampiro frente a ella

—Tu don —dijo simplemente antes de estirar su mano hasta el vampiro, el cual la miro dudoso

—¿Estás segura, querida? —le pregunto mientras lentamente quitaba sus guantes

—Esta bien, Aro —asintió antes de que el vampiro agarre su mano con un poco de emoción y delicadeza

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En la casa de los Lahote no se podía escuchar nada más que los gritos desgarradores de la más grande y única niña, su padre otra vez había vuelto ebrio a casa y en un intento desesperado por intentar proteger a su hermano había iniciado una pelea con su padre mientras le daba la oportunidad a Paul de correr a casa de su mejor amigo

Tatiana sabía que su padre iba a desquitarse con el pequeño de 13 años, por lo que sin importarle las consecuencias le ordenó irse a la casa de Jared

Ahora mismo esas consecuencias las estaba pagando, su padre no paraba de golpearla. Aún estando en el suelo y sangrando, el mayor seguía dándole puñetazos y patadas como un animal enloquecido

—¡Eres igual que la zorra de tu madre! —otro golpe en las costillas hizo que soltara un grito —¡Debiste haberte muerto el día del parto! —golpe —¡Eres una decepción para todos! —una patada en su boca logro que quedara casi inconsciente

Tatiana no lo entendía, ¿Que habían echo ellos para merecer que su padre los odiara? ¿Eran tan malos hijos? Tal vez no se habían esforzado lo suficiente para hacerlo sentir orgulloso, o tal vez el tenía razón y eran malos hijos. Tal vez su padre tenía razón al decir que era una zorra que merecía morir 

—¿Te gusta andar de zorra por todos lados? —le pregunto mientras la agarraba del pelo —¡RESPONDÉ CUANDO TE HABLÓ!

—N-no —la niña de solo 16 años apenas podía hablar debido al dolor

—¿No? —pregunto con burla antes de darle un rodillazo en la cara —Te voy a enseñar cómo se tratan a las zorras como tú —y sin que Tatiana lo pudiera ver venir, su padre se empezó a desabrochar el cinturón con torpeza

—N-no, papá p-por favor —suplicó sin fuerzas

—¡CÁLLATE! ¡CÁLLATE! —otra patada en su estómago

Desde esa noche el poco aprecio que Tatiana le tenía a su padre había desaparecido junto a sus ganas de vivir, esa noche donde solo la luna fue testigo de los gritos de una de sus pequeñas y futuras hijas, esa noche donde el infierno de la pequeña rubia apenas había comenzado. Esa noche donde su padre la dejo tirada en el suelo luego de haberse violado, llena de sangre, vómito, semen y meado.

Esa maldita noche donde ese monstruo había dejado su marca en el vientre de su hija, donde la había dejado con cinco costillas rotas, una fractura en la muñeca, lesiones graves en la cabeza y muchas cosas más

Esa noche Tatiana Lahote había demostrado ser una sobreviviente, donde a pesar de todo saco las fuerzas para levantarse y caminar hasta la habitación de su padre donde esté se encontraba durmiendo plácidamente

La chica lo miro totalmente enojada, se sentía asqueada de ella misma por su culpa, y sin vérselo venir ya se encontraba temblando sin quitan la mirada de su padre. Y cuando menos lo espero se encontraba encima de su padre en forma de un lobo gigante. Tatiana ni siquiera pensó en lo que se había convertido o en la voz en su cabeza, lo único que hacía era morder y rasguñar a aquel monstruo que la atormentaba desde niña

—Tatiana, debes parar. Esta muerto —Sam tuvo que utilizar su voz de alfa para que finalmente el lobo gris dejará de atacar a los pedazos que quedaban de su padre