¿Me ayudaría?

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Becky asintió.

-Está bien, Freen - dijo-. Me iré cuando mi celo termine.

A Freen le dolió un poco el corazón ante eso, pero al menos podría tener a Becky unos días más.

Volvió a terminar de lavar las cosas.

-Y, dime, Becky, ¿Cómo son tus celos? 

Freen sabía que generalmente el celo de los omegas duraba un par de días, en el cual su olor se incrementaba considerablemente, sumado a las molestias de sus órganos reproductores;  y tendrían una necesidad casi insaciable de sexo, por su instinto de lobo de reproducirse.

Aunque podía ver que Becky controlaba bastante bien el tema del sexo, porque hasta ahora, no había notado que la chica pidiera consolarse.

Freen nunca había acompañado a una omega en celo, pero su madre le había explicado bastante bien las cosas.

Su madre, a pesar de ser una beta, tenía muchas amigas omegas, y conocía tan bien como ellas mismas el tema de los celos, y no se había molestado cuando Freen le pidió que le dijera cómo eran.

Pero también tenía entendido que el celo podía variar entre omega y omega, para algunos duraba menos días, otros un poco más, algunos sufrían malestares y otros no, incluso, había omegas que tenían necesidad de reproducirse toda una semana.

Al no escuchar respuesta, Freen miró sobre su hombro a una ruborizada Becky que jugaba inquieta con sus dedos. 

-Becky- la omega alzó la vista hacia sus ojos-, no tengas vergüenza, si se supone que soy tu alfa debería conocer tus celos. 

Becky sonrió un poco.

-Pues... No son nada muy fuera de lo común.  Comienza con mí olor, que se incrementa un poco los días anteriores al celo, hasta que este comienza y se mantiene igual de fuerte por unos tres o cuatro días, no sufro de malestares de vientre fuertes pero si de dolores de cabeza, aunque sólo los primeros dos días. Puedo controlar bastante bien el tema de... Querer reproducirme.

-Follar - dijo Freen-, sin vergüenza, si no te gusta esa palabra tienes otras más para lo mismo: Sexo, hacer el amor... Si es que quieres hacerlo un poco más romántico. 

-Freen, un tronco muerto es más romántico que usted- dijo la omega con una sonrisa-, no seré romántica. Pero si hay algo que deba saber de mis celos... Pues, mis ganas de follar van en aumento conforme los días, y mi loba se hace un tanto incontrolable con ese tema, y ​​exige más atención con el paso de los días. Los primeros días lo voy controlando bien, no parece que esté en celo, menos por mí olor, claro. Por eso es que yo tampoco me doy cuenta muy rápido de que llegó.

Freen asintió, escuchando atentamente.

-Aunque puede que este celo sea algo diferente a los demás- la voz de Becky sonó más tímida-, considerando que estoy contigo, y que eres mí alfa, y mí loba está más inquieta que antes y quiere.- la omega estaba totalmente ruborizada, se mordió el labio, dejando de hablar.

Freen rio un poco, sintió la ligera vergüenza de la omega, la miró con una sonrisa amable.

-¿Tienes la necesidad de follar conmigo? - completó, en tono algo egocéntrico. 

Becky frunció un poco el ceño, Freen no se tomaba en serio, o no con la misma que tenía Becky, sobre el tema del celo.

-Tú nunca .. Pasaste un celo con nadie, ¿Verdad? - la pregunta de Freen sonó bastante tímida.

Becky negó.

-Pasaba la mayoría del tiempo con mi abuelita- dijo-, ella es la única omega en la familia a parte de mí, es mí gran apoyo en temas de omega y en temas de la vida en general. Cuando llegaba mí celo me quedaba con ella, tiene una casa detrás de la de mí familia, más acogedora y agradable que en la que "vivo" - las comillas destacaron el hecho de que Becky no pasaba casi nada de tiempo en su casa-. Ella me cuidaba todos los días que durara el celo y para los últimos... Pues ella también guardaba mis juguetes- se ruborizó mucho más con esa última frase. 

Freen esbozó una sonrisa, asintiendo.  Secó sus manos en sus pantalones, ya terminada la tarea de lavar.

-Freen- la voz de la omega sonó muy baja, tímida, Freen la miró sin decir nada- ...Entiendo que usted pues ... No tenga... Cuando yo no p-pueda... Eh

Freen alzo una ceja. 

-¿Podría-ayudarme-en-mi-celo?

La pregunta sonó apresurada, las palabras salieron todas amontonadas, y el tono tan inseguro de Becky hizo que Freen tardara un momento en traducir lo que había dicho.

El calor subió a su rostro y su corazón se aceleró.

Dentro de su pecho, su loba también estaba algo nerviosa, pero a su vez, emocionada, y corría en círculos.

Becky alzó un poco la vista, para mirar con timidez a Freen.

-Be-Becky-

-Está bien, olvídalo- la omega sonaba decepcionada, y comenzó a levantarse de la silla.

Freen la tomó por los hombros y volvió a sentarla, recibiendo una mirada confundida por parte de Becky.

-Sí, Becky- dijo- te ayudaré.

Becky comenzó a sonreír de a poco, estirando sus labios y abultado sus mejillas.

Una sonrisa muy linda la cual la hacía ver más linda.

A Freen se le contagió un poco esa sonrisa.

-No tiene que hacerlo si no quiere, Freen- Becky ladeó un poco su cabeza, sonriendo-. No quiero que se sienta obligada.

Freen negó.

- No lo digas como si fuera una obligación, como ir a la universidad o cumplir horario de trabajo, Becky... -dijo- Esto es... Diferente. Quiero ayudarte, tal como te ayuda a permanecer escondida, quiero... Ayudarte con eso también.

Becky solo continúo sonriendo, con las mejillas totalmente rojas.

- Prometo ayudarte.

- Prometo ayudarte

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DELTA || FreenbeckyOù les histoires vivent. Découvrez maintenant