- No es tu problema, Lee. Bailar aquí es mi decisión y no tiene que ver contigo.

- Te equivocas, cachorro, porque desde que reconocí tu cuerpo sobre el escenario, cada maldito movimiento que hacía me hizo pensar lo bien que podrías bailar sobre mi polla.

Porque ahora no quiero perderte,

estoy mirando justo a la otra mitad de mí mismo.

El vacío que se asentó en mi corazón,

es un espacio que ahora tú abrazas.

Enséñame cómo luchar por el ahora,

y te digo, nena,

fue fácil volver aquí a por ti,

una vez que comprendí,

que todo el tiempo habías estado justo aquí.

Seungmin torció el gesto y apartó el cuerpo de Minho que sorpresivamente se pegó contra él.

- Espero que te quede claro que no tengo la insana intención de volverme a acostar contigo.

- Espero que te quede claro que sí va a pasar -le dijo el arrogante tomando al muchacho por la cintura, apresandolo entre sus manos.

Minho parecía determinado a tomar cuanto pudiese de Seungmin, y el muchacho en realidad se sentía halagado de recibir las atenciones del motociclista, aunque su conciencia no dejaba de recordarle que era un hombre con pareja y que le estaría siendo infiel otra vez si permitía que Minho lo tomase.

- ¿Y por qué estés tan seguro?

- Porque desde aquí puedo oler cuan excitado estás -gruñó Minho contra los labios del bailarín.

- No digas tonterías.

Una carcajada resonó, cohibiendo a Seungmin y sus torpes intentos por detener al hombre. Él mismo tuvo que reconocer que su cuerpo sí estaba caliente por la situación, totalmente rendido a la lujuria que estar vestido tan indecentemente le causaba con un hombre tan imponente como Minho.

Es como si fueras mi espejo,

mi espejo mirándome fijamente.

No podría crecer más con cualquier otra a mi lado.

Y ahora está claro, como esta promesa que estamos haciendo,

dos reflejos convertidos en uno.

Porque es como si fueras mi espejo,

mi espejo mirándome fijamente,

mirándome fijamente.

-Dime, ¿tu novio sabe que te gusta contonearte sobre un escenario casi desnudo?

- ¿Cómo crees que lo conocí? -se burló Seungmin, luciendo una arrogante sonrisa.

- Así que sí te has dejado follar aquí, ¡vaya!, entonces no puedes negarte a que sea yo quien te folle.

Y sin pedir permiso siquiera, Minho se lanzó contra los labios de Seungmin, luchando por abrir esa dulce boca estupefacta y explorar con su lengua los confines de esa húmeda cueva. Sus manos acariciaron los muslos del jovencito cuyos brazos se enredaron en el cuello del alto, incapaz de negarse a esos besos de pecado.

Es impresionante, un original,

porque no parece una mera muestra,

fight for love ✧ knowminWhere stories live. Discover now