Yo en Konosuba

Capítulo 1: Que valga la pena

Anime y Manga, eso es algo que jamás a estado presente en toda mi vida, mis padres eran Otakus de antaño, en sus tiempos eran marginados, despreciados y criticados, obligados a ocultar sus gustos si es que no querían quedarse estancados en el camino de la vida.

Es debido a esto que mis padres decidieron empeñarse fervientemente en alejarme de todo tipo de cosas Frikis como ellos le decían, me parecía raro y hasta injusto que me prohibieran ver cosas que me llamaban la atención, deseaba librarme de la curiosidad pero con el tiempo me rendí y perdí el interés en ellas.

Me encontraba de camino a la Universidad, hoy era el primer día y odiaría llegar tarde... sin embargo.

- ¿Porqué demonios tenía que empezar a las 6 de la mañana?, malditas ceremonias de inicio.

Había salido a las 5 de la mañana de camino a la escuela, el coche se había averiado y los autobuses no pasaban cerca de mi casa, el sol aún no salía y el alumbrado público estaba apagado, esto me estaba poniendo de los nervios así que me puso los audífonos para relajarme un poco... GRAN ERROR.

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- ¿Uh, Donde estoy?

De repente me encontraba en un lugar aún más oscuro sentado en una silla frente a una chica de aspecto amable de igual forma sentada, éramos iluminados por una luz que venía desde arriba pero no lograba ver que la provocaba, a mis pies el piso era de temática de ajedrez y detrás de nosotros no había más que oscuridad.

- Bienvenido seas al más allá Hachi Kurosawa.

La chica frente a mí soltó esas palabras dejándome conmocionado.

- ...¿eh?

- Si, lastimosamente haz muerto a una edad muy joven.

- *Gulp* E-Entonces eso quiere decir que tu eres... ¿Dios?.

- Bueno, se podría decir que si, soy la Diosa del Agua, Aqua.

Si lo que ella decía era cierto entonces...- ¿Qué... será de mí ahora?.

- Bueno, aquí se te dan 3 opciones. 1: Vuelves a a tu mundo como una persona nueva y sin tus recuerdos, 2: Vas al cielo a descansar en paz, pero ya te digo yo que es muy aburrido, 3:¡Te mando a un mundo lleno de magia, espadas y aventuras, embarcándote en una travesía legendaria para derrotar al Rey Demonio!.

- ...La tres.

- ¡Maravilloso, elige cualquiera de estas cartas como atributo u objeto que te ayudaran mucho en tu aventura!. - La Diosa mostraba una sonrisa impaciente, ¿realmente estaba calificada para atender a recién fallecidos?.

Simplemente agarré una carta al azar, lo que menos quería era estar allí en ese momento.

Una luz celeste cubrió mi cuerpo, elevándome y perdiendo de vista el escenario anterior, la diosa parecía decir algunas palabras de despedida pero no entendía lo que decía.

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Bajo un cielo azul

En una pradera a las afueras de algún pueblo, una luz brillante emergió de la nada para hacer aparecer a un joven con la cabeza agachada y mirada sombría.

- ... *Sniff* ¿porqué?... ¿porqué me tenía que pasar a mí?. - El joven había quebrado en llanto una vez quedado solo, no le gustaba la idea de llorar frente a las personas. - (Todo lo que hice, todo el esfuerzo de mis padres... todo fue un desperdicio... jamás los volveré a ver, mis amigos... todo).