A Genya, no le quedó otra que obedecer a su hermano y retirarse del lugar, dejando así solos al albino y al azabache. No obstante, le era imposible no quejarse de la situación, su querido hermano mayor Sanemi, poniendo al chismoso de Obanai y sus chismes sobre él, QUE SE SUPONE ERA LA ÚNICA FAMILIA QUE LE QUEDABA. Esto hizo pensar al de cicatriz -¿Que tan grave será lo que Obanai le quería contar al mayor de los shinazugawa?-pensaba mientras subía las escaleras. -Si no quiere que yo, su hermano y única familia lo sepa...no debe ser bueno-
Razonó, ya que Sanemi nunca le ocultaba nada a Genya. Y si lo hacía, era porque el contexto o el referente era muy pero muy grave.
Sabía que era sobre Zenitsu y Uzui...
-Tal vez ... es algo de lo que ya estoy al pendiente- trataba de convencerse- pero, ¿y si no es así?... ¿que podría ser?- este se detuvo.
Tantas preguntas, tantas dudas, tanto misterio, deseperaban a Genya. ¡Vamos! Tenía 15 años, la naturaleza de la juventud lo obligaba a desobedecer las reglas... Estaba en su instinto, y en el de cualquier pre-adolescente ¿no?.
Después de pensar y analizar, decidió desobedecer, sería solo una UNA sola vez...y nunca más. Ya estaba harto de ser el hermano menor perfecto, al carajo con eso, la vida es una sola y hay que disfrutarla en su más mínimo detalle. Aparte que lo usaría como venganza al mal trato que recibía por parte de su hermano como uno de sus educadores, cada punto que le restó, cada actividad que le tachó, cada regaño que recibió en clases, todo eso sería vengado por el shinazugawa junior.
Sigilosamente, bajó las escaleras que anteriormente estaba subiendo para acercarse un poco al marco de la puerta, contando con que esta estaría abierta, pero al acercarse, contemplo la poca confianza de su hermano, -¡que hijo de puta!- susurró en lo más alto de su cólera. A pesar de nunca desobedecer las estrictas órdenes de su hermano al pié de la letra, ¡este ni siquiera tenía la confianza suficiente de dejar la puerta abierta! Nunca lo desobedeció...bueno, una sola vez, cuando se hizo amigo de Tanjiro Kamado, pero ¡hey! Tenía sus motivos, y el derecho de hacerse amigo de quién se le de la gana. Sanemi no podía prohibirle entablar una amistad con Tanjirou, por más que Tomioka, el profesor de educación física y algunas veces de literatura o calculo, sea su hermano, el conflicto y la bronca era entre Sanemi y Gyuu, eso no tenía por qué afectar su amistad con el de aretes, Genya odiaba a Obanai más de lo su hermano odiaba al profesor de educación física, y sin embargo, nunca le ordenó o presionó para que se dejara de hablar con el, su ideología estaba bien...¿Verdad?.
Bueno eso no importa ahora. Debía escuchar o al menos tratar de escuchar la "importante noticia" que Iguro debía contarle a Sanemi "con demasiada urgencia". Posó su oreja en la dura y fría pared. No pudo escuchar mucho, pero con lo que logró escuchar le alcanzaba y le sobraba:
____- ¡Lo que escuchaste Sanemi! ¡Te digo que si lo hicieron!- se oía molesto. Tal vez por qué su mejor amigo no le creía.
____- ¡Si! Y yo te estoy diciendo que cuándo Kaigaku fue a preguntarle a Uzui el lo negó todo- Sanemi, en canbio, se lo oía irritado.
____- ¡¿Y que esperabas Sanemi?! Que dijera: "si, es verdad lo que cuentan, me encanta tu hermano y le dí como cajón que no cierra en el viejo laboratorio abandonado, lo siento", ¡Sanemi no seas ingenuo! Es obvio que Uzui cubriría a toda costa que hizo el frutifantástico con el hermano de Kaigaku! Es obvio que le iba a decir que no!. ¿Es que acaso no piensas?- Argumentó.
____-...- Sanemi, quedó sin palabras, los argumentos de Iguro eran muy buenos, por eso nunca perdía una discusión, sin embargo... Lo que más lo sorprendía era que Uzui, se aprovechó de Zenitsu, teniendo así una "aventura sexual" siendo el su profesor y el rubio su alumno. El no quería creer, iba a defender al hermano de Kaigaku hasta que se demuestre lo contrario, el no creía capaz de hacer eso a zenitsu... Pero Iguro tenía razón en cierto sentido... ¿Como saber quién de los dos estaba equivocado?....
Eso bastó para que Genya dejará de escuchar y se dirigiera casi corriendo a su cuarto esperando a que su hermano no se haya dado cuenta de su presencia, feliz porque ya tenía como humillar a zenitsu. Con eso ya se podía ir. Mal hecho, ya que se perdió unos que otros detalles:
