1,2,3... Testing Love

016

EunJi miraba con atención al abogado quien estaba leyendo algunos papeles, la niña suspiro pesadamente y dejó el tenedor a un lado de su plato de comida.

— ¿Sucede algo Jinnie? — Hyungshik dejo los papeles a un lado para poner atención en la niña— ¿No quieres comer eso? Puedo conseguirte algo más

Hyungshik se encargaba de cuidarla después de que salía de la guardería, aunque el ambiente de un buffet no era el más interesante para la niña sin embargo se había acostumbrado a la rutina.

— A ti te gusta mi mamá, ¿no es así? — Hyungshik quedo sorprendido ante la pregunta de EunJi, la niña miro de manera seria al adulto que la cuidaba.

— ¿Por qué estas preguntando eso Jinnie? — una risa nerviosa se apodero de Hyungshik quien no sabía que responder.

— Mis amigos dicen que solo me cuidas porque quieres casarte con mi madre... ¿eso es verdad? 

— Te diré un secreto EunJi pero no debes decirlo a nadie ¿si? — Hyungshik se recostó en su silla— Sí, me gusta tu mamá pero eso no significa que te cuido por eso, soy amigo de tu madre y quiero ayudarla en lo que puedo. Lo más importante para mi es que tanto Amaya como tú sean felices ¿está bien?

— No quiero que seas mi padrastro, papá aún esta vivo...

Hyungshik no pudo responder a eso, sintió que el aire le faltaba a sus pulmones y su pecho se apretaba un poco. 

— Debo ir a traer algunos papeles, te traeré una coca cola ¿de acuerdo? — Hyungshik se levantó casi de inmediato de la silla, al salir de su oficina sintió como el aire entro de nuevo por sus pulmones.

Para él no era ningún secreto que estaba enamorado de la japonesa, su enamoramiento había empezado poco después de que EunJi cumpliera dos años sin embargo aún no encontraba el valor para poder revelar sus sentimientos. Sin embargo... las palabras de la niña lo habían herido demasiado.

— Gracias por cuidar de Jinnie — Amaya sonrió de manera amable mientras le entregaba una caja de donas— Espero que te gusten.

— No hay de que, Jinnie no da problemas es como un angelito — Hyungshik apreció un poco las donas— Gracias por la comida May, a la próxima yo te invitaré a un café ¿qué dices?

— Te llamaré para avisar cuando tengo el día libre —En el camino EunJi iba más callada de lo normal, lo cual empezó a preocupar a Amaya— ¿La pasaste bien Jinnie?

— Mamá, ¿a ti te gusta Hyu? 

— ¿Por qué preguntas eso Jinnie? — La niña dejo de caminar para poder mirar a su madre, un pequeño puchero se formo en sus labios— ¿Qué sucede Jinnie? — Amaya se puso en cuclillas para estar a su altura.

— ¿Estás saliendo con Hyu?¿Es por eso que no estás con papá? — Amaya puso una mano sobre la regordeta mejilla de EunJi.

— Hay cosas que no puedo explicarte ahora Jinnie, tu papá y yo aún debemos hablar de algunas cosas pero no creo que vayamos a vivir juntos — EunJi ladeo su cabeza— No salgo con Hyu pero si llegó a hacerlo en un futuro no quiero que te enojes conmigo o con él

— ¿Podemos ir a ver a papá? Tienen un fanmeeting aquí la próxima semana

— ¿Y si cenamos una hamburguesa? 

Eunji aún no podía comprender algunas cosas, encontraba los problemas de adultos demasiado complicados de resolver, ¿acaso no podían resolverlo con un apretón de manos o un abrazo? Por un momento llegó a pensar que Hyu era su padre sin embargo descubrió aquella pequeña caja en el clóset fue como que un mundo nuevo se abriera ante sus pequeños ojos; antes de empezar su travesía hasta llegar a la puerta de la casa de su padre, se encargo de aprender muy bien a escribir su nombre y a memorizar el rostro de su progenitor aunque no era tan difícil puesto que habían carteles con su rostro por casi todos los lugares.

Desde que descubrió aquella caja de recuerdos EunJi no pudo evitar preguntarse el porque sus padres se habían separado aunque creída casi fielmente que era por la agenda de su padre. ¿Por qué él tenía que trabajar tanto? No lo entendía.

El sentimiento de nostalgia golpeó a SeokJin cuando se estaba preparando para dormir, se había acostumbrado a tener un poco de ruido en su apartamento pero ahora que estaba vacío de nuevo, no le gustaba por completo. ¿Qué había cambiado en él? ¿acaso es posible que haya cambiado en tan solo dos meses? No es como si se sintiera diferente.

SeokJin se levantó de la cama hasta llegar a su clóset, tomo con cuidado la caja blanca que se encontraba al fondo y se sentó en el suelo, en aquella caja se encontraban las fotos que apreciaba con su vida, habían unas fotos de su familia, de sus amigos y de Amaya... 

Tomo con cuidado una de las polaroid, recordaba muy bien la fecha en la que aquella foto, fue cuando hicieron un viaje a la playa. El cabello le caía en la cara, el sol iluminaba muy bien la foto y tenía una de las más grandes sonrisas que alguna vez había observado en su vida.

¿Qué tanto habrían cambiado las cosas si ese día no hubiera hecho caso a su mánager? Siempre culpaba a ese viejo de haberle arruinado su relación pero intentaba evitar pensar en sus propios errores porque cada vez que lo hacía su corazón se sentía más pesado. 

¿Qué tan lindo hubiera sido estar en el nacimiento de EunJi? Le hubiera encantado estar en el proceso de embarazo de Amaya aunque eso hubiera implicado abandonar algunas cosas.

Ella nunca había abandonado su mente, al contrario, cada vez que se subía al escenario intentaba encontrarla con la mirada pero después de unos años simplemente se había cansado de no encontrarla. Y fue por esos mismos momentos en donde conoció a Jieun, ninguno de los dos se tomaba enserio porque sabían que sus corazones pertenecían a otra persona.