Prefacio.

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    Cuando te han quitado todo lo que amas, alguien tiene que pagar, y más si ese alguien tuvo la culpa de tu infelicidad, eso es lo que a mí me importa solucionar en mi vida, la muerte de mis padres, lo único que me importaba en la vida y me fue arrebatado por la fuerza, por algo que no debía sucederles, todo por mi culpa, nunca debí meterme en problemas, nunca debieron llamar a papá para que fuera por mí, nunca debieron atravesar ese callejón para llegar más rápido, nunca debieron seguirle el juego a ese chico, ese chico nunca debió sacar el cuchillo... Nunca debí haber cambiado, pero lo hice, para bien o para mal, lo hice y no había marcha atrás, ellos se habían ido y yo no podía hacer nada para regresarlos a mí... ellos se habían ido, se habían marchado para nunca jamás volver a mi lado y todo por mi culpa.

Mi nombre, Johanna Hale, mi edad 16 años y mi peor error, ser una perra a la que no le importa nada, ni reglas, ni autoridad, nada, hasta este día, me encontraba sola y en estado de shock, no supe cómo llegué al hospital, pero estaba allí, viendo llorar a mi profesora abrazada de mis hombros, yo no comprendía lo que pasaba, estaba hundida y no parecía que saliera a la superficie.

La Hija de NadieWhere stories live. Discover now