~ℕ𝕚𝕟̃𝕠𝕤~ [Spartor][FINALIZADA]

02

Era una bella mañana, todo parecía que saldría bien para ambos niños, era su primer día es escuela y estaban emocionados, bueno, Gonzalo se encontraba emocionado, Andrés no quería separarse de sus papás, pero Gonzalo había ayudado a calmarlo en más de una ocasión.

Sin más ambos niños se despidieron de sus padres y entraron a los grandes pasillos de aquel gran lugar donde de ahora en adelante irían cada mañana para estudiar y aprender cosas nuevas, Gonzalo se notaba emocionado, haría nuevos amigos, por otro lado Andrés no se separaba de el y no soltaba su mano.

No quería alejarse de la única persona que conocía en aquel gran y aterrador lugar, había mucha gente, algo que a Andrés no le agradaba mucho, no sabía que hacer ante tal situación, sentía que todos los ojos en el lugar se dirigían hacia el y lo miraban, lo que aterraba más al menor, quien se aferraba a Gonzalo con fuerza.

Raptor: no tengas miedo Andrés, yo estaré contigo y te veré en el receso, tengo que ir a mi salón

Sparta: llévame contigo.. -dijo triste-

Raptor: tu eres de otro salón, no puedes venir conmigo, te veré cuando las clases terminen, lo prometo, si?

Tras algunos minutos de charla, el chico logro convencer al menor y lo llevo a su salón, el castaño se despidió del pelirrojo con un beso en la mejilla, Gonzalo le dió un besito en la frente para la buena suerte, algo que hizo reír a Andrés y lo vio irse, este suspiró y entro a su salón, viendo a los niños ya en sus escritorios, el solo los imitó y se sentó en cualquier escritorio que no estuviera ocupado.

Gonzalo por otro lado, se dirigió a su salón con una sonrisa, no solo podría conocer gente nueva y hacer amigos, sino que podría invitar a sus nuevos amigos a su hogar, pero le preocupaba que su pequeño y querido Andrés no la pasé tan bien como el, quería que Andrés fuera feliz en su primer día.

Pasaron las horas y la campana sonar indicando el receso por fin se escuchó por todo el lugar, los niños corrían y salían de sus salones directo a la cafetería, algunos con sus almuerzos preparados por sus padres y demás, Gonzalo salió de su salón y se dirigió al de su pequeño Andrés, cuando llegó lo vio con un chico, otro castaño pero más algo que el, ambos parecían hablar entretenidos, sonrió con alegría y se acercó a ellos.

Raptor: Andrés!, Tienes un amigo y no soy yo..! -emocionado-

Sparta: -lo mira y sonríe-

El pequeño lo abrazo por el cuello y se aferró a él, sintiendo como el pelirrojo lo abrazaba también, beso su mejilla y se separó de el.

Sparta: Gonzalo, te presento a mi nuevo amigo Victor

Victor: hola..!

Raptor: hola Victor, soy Gonzalo, me gustan mucho los dinosaurios y me gusta la pizza!

Sparta: -rie levemente- el es mi amigo Gonzalo, Vic, es mi novio también!

Raptor: sip!, Soy su novio..!

Los niños sonreían con inocencia, no sabían que aquella palabra les causaría tantos problemas tanto ahora como en el futuro, el castaño alto rio y sonrió, feliz de conocer a otro amigo del castaño pequeño, los tres decidieron conocerse un poco más y fueron al patio a sentarse en la sombra de algún árbol para charlar tranquilos.

El pelirrojo abrazaba al castaño pequeño mientras charlaba con el alto, estaban tan entretenidos hablando que no se dieron cuenta de que una pequeña niña se acercaba a ellos.

Una pequeña castaña con una diadema en su cabeza, la cual decoraba con grandes pompones que hacían parecer orejas de perro, cubriendo las suyas propias.

Sparta: hola..

Mike: hola, soy Mirabel, puedo sentarme con ustedes?, No encuentro a mis amigos y no quiero estar sola..

Victor: claro, siéntate con nosotros, linda diadema!

Mike: gracias, me la hizo mi mami.. -sonríe y se sienta con ellos-

Raptor: que bonito, yo quiero una igual!

Mike: le puedo pedir a mi mami que te haga una jeje, a mi amigo le hizo un broche de corona

Sparta: debe ser el rey si tiene una corona.. -sorprendido-

Mike: sip, mi amigo es el rey del mundo, dice que su belleza hará que todos lo obedezcan -rie-

Raptor: entonces yo seré su bufón!

Victor: yo su caballero!

Sparta: yo quiero ser el rey también

Mike: no puedes, solo hay un rey, y la reina soy yo -sonriendo-

Raptor: mi Andrés puede ser lo que él quiera, es el rey de otro mundo!

Mike: oh..! -sorprendida- entonces si puedes ser el rey!

Sparta: -sonríe-

Los niños se la pasaron entre charla y charla, conociéndose cada vez más, la pequeña presencia de la niña les sorprendió un poco, pero no les desagrado en absoluto, todos estaban tan felices de haber conocido a una niña y que está fuera buena gente, los niños pensaban que sería creída o dramática pero aquella pequeña era todo lo contrario a sus pensamientos.

La campana sonó indicando que el receso había terminado, todos se levantaron para comenzar a irse a su respectivo salón.

Mike: fue lindo conocerlos, nos vemos mañana amigos nuevo! -se va corriendo-

Sparta: Mirabel es bonita -sonriendo, toma de la mano a Raptor-

Victor: si, su cabello me gusta!

Raptor: su piel es suave, y sus manos tan pequeñas

Los niños no paraban de hablar de la pequeña Mirabel, cuando llegaron al salón del castaño pequeño y el castaño grande, Gonzalo se despidió del menor con un beso en su mejilla, Andrés hizo lo mismo My se despidieron para que Gonzalo pudiera irse a su salón, no sin antes pedirle a Víctor que cuidara de su pequeño Andrés, Victor sonrió alegre y asintió dejándole en claro que mientras estuviera con Andrés, nadie le haría daño.

El pelirrojo se fue más tranquilo de saber que su pequeño Andrés ya tenía amigos aparte de el y que estaría a salvó con su nuevo amigo.

Pasaron las horas y la campana volvió a sonar, las clases habían terminado y todos los niños se iban a la entrada de la escuela donde sus padres los esperaban para irse, cuando Andrés salió, iba a su lado Victor y Gonzalo, este último lo tomaba de la mano mientras los tres hablaban entre ellos alegremente.

Cuando salieron, los papás de Andrés se sorprendieron al ver a su pequeño bebé haciendo amigos y sonriendo, se alegraron tanto por el, ya que el pequeño no acostumbraba a alejarse de sus padres, los amigos se despidieron y cada uno se fue donde estaban sus padres.

Un día genial y un maravilloso primer día de clases para los pequeños.