𝙲𝚘𝚕𝚍 𝙸𝚜𝚕𝚊𝚗𝚍 || Jack Frost x M!Reader

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𝚂𝚎𝚐𝚞𝚗𝚍𝚘 𝚏𝚕𝚘𝚛𝚎𝚌𝚒𝚖𝚒𝚎𝚗𝚝𝚘 𝚍𝚎 𝚙𝚛𝚒𝚖𝚊𝚟𝚎𝚛𝚊

No había pensado en que tan solo estaba hasta que el invierno se llevó a Jack, no sabía cuántas temporadas había pasado solo esperando que el hombre de la luna me diera otro trabajo… o que me perdonará por lo que había pasado…

La primavera era muy linda, y más cuando las pascuas se acercaban, Conejo siempre me daba una sorpresa para que no me aburriera y desde ese días, trata de verme.

Salí de la choza, espero que algún día cambie de lugar. Las flores salían de sus capullos y ya no había nieve. 

Respiré hondo, desde la vista de Pitch estaba pensado y notificando a los grandes… Creo que conejo con más razón va a venir.

— Mucho tiempo ____ — Su voz sonó a mis espaldas 

— Señor pascuas ¿Que hace aquí en tan ocupado día? — Me alegro tanto de verlo 

— Me gusta venir a verte y además quería ver cómo estás — Él hizo una pausa — Se que es difícil cuando viene a tu mente con su… ¿Cómo se llamaban? 

— Pesadillas — Tome aire, el tema aún era difícil — Odio que ese hermoso poder lo usé para atormentar a la gente 

— Y a tí, nunca te olvides que eres importante ____ — Conejo se acercó, tratando de estar un poco más cerca 

— Se que lo soy, pero no había un nuevo mito desde el y creo que el de la luna está furiosos 

— No lo puede estar y mucho menos tanto tiempo 

— Solo quiero un descanso de este lugar 

Conejo me sonríe, se que está pensado pero no puedo ceder 

— Vamos — Me dice con una sonrisa — Están floreciendo unas hermosas flores y-

— Tengo que estar aquí y lo sabes — Suspiré — Cuando terminé esto, con gusto ire a  acompañarte para pintar huevos 

— ¿Quién es el nuevo? — Se ve que estaba interesado

— Jack Frost, el chico del invierno — No sé cómo lo habré dicho, pero Conejo me miró con gracia 

— Y ese tal Jack es atento contigo

— No caigas en esa conclusión — Dije con un sonrojo, conejo sabía cómo sacarme información

— Solo digo que como suspirante con decir su nombre 

— Ay por favor — Dice con ironía 

— Yo solo digo que si el te hace daño como el maldito Picht, está vez sí que el voy a arrancar sus dientes 

— Ya vete — Dije con gracia — Se que aún no terminas y últimamente ya tienes más trabajo

— Está bien — Dice con gracia — Vendré a verte más seguido, no me gusta que estés solo 

Y tan rápido como llegó tan rápido se fue.