Capítulo 7... Un año y tú regreso

35 7 25
                                    

Hoy ha pasado un año desde que recuperé mi cadena y leí tú nota, también cumplo un año como interna en el hospital y es lo mejor que me ha pasado, es increíble ver y vivir toda la acción que hay en un hospital; muchos se quejan por no tener tiempo para dormir y es cierto, el sueño me mata, pero, no es nada que un café bien cargado no solucione. Ah y... también es mi cumpleaños.

— ¡Eso es hermanita! — gritó Patrick feliz porque logre beber un shot de tequila sin hacer caras raras o toser.

— Feliz cumpleaños Kris. — escuché su voz; me detuve de golpe con el corazón acelerado, me quedé paralizada sin saber que hacer o decir. Sacudí mi cabeza reaccionando y volteé lentamente sabiendo que iba a ver su rostro otra vez y eso me asusta mucho. Ya frente a frente, me regaló una sonrisa y dejó que aprecie esos hermosos ojos azules que tiene, y a pesar de no haberlo superado aún, a pesar de querer abrazarlo y jamás soltarlo. 

— ¡¿Qué carajos haces tú aquí?! — fue lo único que salió de mi boca en ese momento.

— Solo... quería darte este regalo — dijo asustado y estiró su mano con una bolsa de colores.

— ¡Puedes meterte ese regalo por...!

— ¡Wow! Hermanita has demostrado que sigues siendo pésima para beber ¡Mírate! Ya estas ebria — me interrumpió Patrick abrazándome por el hombro.

Se vio con Dylan, cara a cara y se dibujó una gran sonrisa en el rostro de ambos, se acercaron y se abrazaron con fuerza dándose unos golpecitos en la espalda; se separaron, se vieron a los ojos y volvieron a abrazarse. Yo los observaba con una feliz sonrisa, tienen un lazo muy difícil de romper. 

— Me alegra verlos — dijo viendo a Patrick y luego fijo su mirada en mí con esperanza de recibir una gran bienvenida de mi parte, pero se equivoca.

— Mejor me voy — dije intentando caminar, pero casi me caigo y ambos me sostuvieron, entonces sentí nauseas.
— Creo que voy a vomitar. — Patrick hizo una extraña cara de asco asique era obvio quien iba a ayudarme.

— Yo me encargo — dijo Dylan sosteniéndome con fuerza para no volver a tropezarme y me llevo al baño.

Mientras yo vomitaba hasta el alma, tú tenías mi cabello en tus manos asegurándote de que no me caiga en el rostro para que no se ensucie. Y cuando al fin logré dejar de vomitar, sentados en el suelo arrimados a la puerta del baño y sintiéndome mucho mejor, decidí hablar con tranquilidad. 

— Eres muy famoso, tus libros son muy buenos — dije iniciando un tema de conversación, pero sin mirarlo a la cara, solo al frente.

— ¿Los has leído? — exclamaste sorprendido, tú si me observas con atención haciendo que se me dificulte respirar teniéndote tan cerca, sintiendo tú brazo rozar el mío estando en un espacio tan pequeño. — Kris yo...

— ¿Puedo preguntarte algo? Es que no he podido dormir en paz estos años con esta interrogante en mis pensamientos — te interrumpí hablando con rapidez, tú asentiste. — ¿Mi papá te dio dinero para dejarme? Digo, esa vez los escuche en la oficina ¿Volvieron a hablar de eso? ¿Por eso te fuiste?

— Tú papá no me dio dinero, más bien yo le dije que me iba, pero le hice prometer que te ayudaría a pagar la universidad y la residencia y todo — te explicaste mirando tus pies los cuales golpeabas, uno contra el otro. — Me fui porque estabas muy mal, querías esforzaste tanto solo por estar conmigo, Kris; las cosas no estaban a nuestro favor y sabía que no te rendirías, que morirías en el intento y eso... era algo que no podía permitir

— ¿Por qué?

— Porque te amaba, porque te amo — respondiste mirándome y atrayendo mis ojos hacia los tuyos. — Se que has de odiarme en este momento, pero, es cierto

DE VUELTA A TIWhere stories live. Discover now