- ¿Ya son novios? - a penas Noah y yo entramos al departamento y Alyshi corrió a nosotros como un remolino.
- ¿Por qué piensas eso? - preguntó Noah en un intento de no sonar nervioso.
- Porque te he visto más feliz estos días. - mi vista se dirigió a él y sonreí, me arrodillé frente a ella aún con mi sonrisa en labios.
- ¿Solo eso?
- No, también te oí ayer que estabas soñando con ella, la llamabas, decías: Ashley, Ashley. - al ver a Noah lo encontré más sonrojado y avergonzado.
- Bueno, pequeña estás en lo correcto. Somos novios.
- ¡Al fin! ¿Te puedo decir mami?
- Calmada niña. - Noah le revolvió el cabello con ternura. - Vengan. - cargue a la pequeña y lo seguí hasta el sofá.
- Si tú me quieres decir así pues sí.
- Siiiiii y ¿Cuándo fue? - los dos nos miramos cómplices y esa sonrisa hablo por nosotros.
- Fue hace unos días - dijo él con una sonrisa.
- ¿Papi fuiste tú? - no pude evitar reírme ¿Cómo no hacerlo teniendo a Alyshi al lado diciendo eso y a Noah mirándome con esos ojos grises llenos de burla?
- ¡Te va a volver a doler la panza! - me acuso con una sonrisa.
- Sí Aly, fui yo.
- ¡Viste que si podías! - mi risa se intensificó mucho más.
- Es que parece que tu papá me tenía miedo.
- ¿Miedo? ¿De qué?
- Parece que es miedoso. - hable burlándome.
- No te rías mucho que te puedo castigar.
- ¿Y como me castigarías?
- ¿En serio lo quieres descubrir? - se inclinó hacia delante para estar un poco más cerca de mí.
- ¿Qué crees tú? - dije con una mirada seductora.
- Qué sí.
- Bueno ahí tienes tu respuesta.
- Muy, pero muy interesante.
- Si, si lo es. - puede que no solamente yo haya sido la única que sintió la mirada de Aly.
- ¿Quieren salir? - Noah acotó con una sonrisa.
- Sííííí, pero ¿A dónde?
- Al parque y después a McDonald's.
- También podemos comer helados.
- Claro.
- Entonces vámonos.
- Me voy a cambiar - la pequeña salió corriendo con una sonrisa.
- Un tiempo para nosotros dos. - suspiró y se sentó al lado mío. - ¿Cómo estás?
- Bien y ¿Tú?
- Mejor porque estás conmigo. - sonreí sin siquiera pensarlo.
- ¿Cómo es eso que tú me estabas llamando dormido?
- Oh vamos no te burles
- No me burlo, solo me dio curiosidad.
- Ahhh ¿Y sabes lo qué les pasa a los curiosos? - una sonrisa malévola en sus labios.
- ¿Qué?
- Esto. - se abalanzó a mí causándome cosquillas.
- ¡No! ¡Noah sabes que no me gustan las cosquillas! - a penas pude hablar entre risas - Te puedo lastimar...
YOU ARE READING
Cartas para mi ex
RomanceAshley todavía no puede superar la ruptura que tuvo con su primer novio, y empieza a escribir cartas para el, cartas hecha por un corazón herido... ¿Será que el podrá leer las cartas?