—Hola, hermosa.

El hoyuelo en su mejilla izquierda volviéndose prominente cuando él me sonrió, su diversión haciéndose notoria. Harry reconoció mi sorpresa, no esperaba verlo en las instalaciones de la tienda, por lo general se sentaba y esperaba en su Range Rover. Steve todavía tenía un poco de dudas del hombre alto que le había dado una hemorragia nasal.

—Normalmente sales a tiempo—Harry echó un vistazo a su reloj confirmando mi retraso de sólo unos minutos.

Le agarré de la muñeca, rizos sobresaliendo por debajo de su gorro mientras me miraba. Su carácter protector era tan fuerte como siempre. Puede ser abrumador a veces, pero no podía negar la sensación de calor que me provocaba saber que Harry se preocupaba por mí. O el hecho de que se veía increíblemente sexy cuando sus rasgos se endurecían, tensando su mandíbula, sus cejas fruncidas. Todo lo que quería hacer era besarlo, hacerle olvidar lo que lo llevaba a esa oscuridad que se infiltraba en sus ojos impresionantes. Era una técnica que ha demostrado ser muy exitosa para fomentar a Harry a encontrar algún tipo de equilibrio.

—Vamos, bebé.

Mi mano fue tomada entre las suyas, llevándome a la salida. Admiré lo grande que era su palma cuando Harry la presionó contra el cristal, manteniéndolo abierto para que yo saliera. Recibió mi silencioso "gracias" cuando pasé bajo su brazo.

Aspiré una profundamente, absorbiendo el olor de la lluvia sobre el asfalto. Era uno de mis aromas favoritos, eso y el olor de Harry.

El viaje en coche constó de miradas prolongadas, la temperatura de la situación anterior aumentando. La atención de Harry fue sacada de la carretera cuando yo apoyé la mano sobre su rodilla. Sus ojos insinuando lujuria, mi toque acariciando su muslo izquierdo mientras él se desplazó un poco en su asiento. Cuando nos detuvimos por el semáforo, mi mano se deslizó un poco más arriba. El pecho de Harry subía y bajaba de forma desigual, lamiendo alrededor de sus labios mientras desesperadamente trataba de concentrarse. No pude evitar la pequeña sonrisa formándose en mi cara, mi apretón causando que la respiración de Harry se enganche, sus converse blancas apretando el pedal como los músculos de sus muslos se tensaron.

— ¿Estás tratando de matarnos? —su voz saliendo en una carcajada.

Creo que nunca lo había visto tan nervioso antes, el tono rosa apareciendo en sus mejillas mientras yo continuaba mi toque encendido. Era un cambio refrescante, normalmente yo era la que tenía dificultades para mantener la compostura. Cuando las luces cambiaron de rojo a ámbar, mis dedos rozaron su entrepierna. La sorpresa de Harry se deslizó de su boca en una maldición, el coche sacudiéndose hacia adelante a medida que frenamos de golpe. Mi risa hizo eco en todo el interior del vehículo, el pitido detrás de nosotros en señalización de los conductores enfadados con impaciencia esperando a que nos movamos.

Pasaron unos segundos, el coche acelerando por el camino.

—Creo que lo mejor es que te dejes tus manos para ti misma mientras estoy conduciendo—bromeó Harry.

Me reí, asintiendo con la cabeza. No pasó mucho tiempo antes de que se detuviera en la acera frente a mi casa.

Mi mirada tímida encontrándose con la de Harry mientras él sostuvo su labio inferior entre sus dientes.

— ¿Q-Quieres entrar? —le pregunté en voz baja.

—Sí—él contestó bruscamente.

Era humorístico lo obvio de su entusiasmo, impulsado por la idea de lo que estaba dispuesta a hacer por él si es que mi pequeña actuación en el coche no decía mucho. Harry tenía tanto mi cinturón como el suyo desabrochados en poco tiempo, trotando a mi lado del coche y cogiendo mi mano para ayudarme a bajar. Un fuerte brazo fue puesto por encima de mi hombro, tirando de mí hacia el lado de Harry mientras cruzamos la carretera. Busqué mis llaves, su cálido aliento abanicando por mi cuello mientras me rodeaba con sus brazos desde atrás.

Dark || Harry Styles || Español [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora