Mi Muñeco Preferido - LITIAGO

20- Si nos sobrará el tiempo

— Lit Killah sigues vivo.

— Si y vos no por mucho... — le dió un puñetazo en la cara rompiendole la nariz, al parecer a lit le encantaba romper narices. Toma de la mano de Tiago para sacarlo de allí.

— No deberíamos matarlo?

— Duki se encargará de eso. — se detiene y lo piensa mejor — Si, mejor voy por el...

— Espera... — Tiago se acerca a él y lo besa con pasion, tomándolo por el cuello y sintiendo como el mayor acaricia su cintura.

— Mierda Tiago... no podemos coger ahora, no me beses asiii.

El menor ríe y se anima a preguntar.
— El me dijo que le sacaste los dedos y te los comiste... Eso es verdad?

Lit lo miro y le dió una sonrisa.
— Los vomité, no como porquerías.

Tiago no sabía si reír o llorar, antes se hubiera horrorizado, hoy en día esperaba cualquier cosa de su novio y eso le encantaba.
Tiago lo vio volver y se quedó allí escuchaba disparos y más cosas, esa casa ahora estaba siendo un campo de batalla, escucho un grito.

— Julián?... — miro su arma y aún le quedaban balas, asique bajo para ayudarlo.

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Los Dragones se había adelantado habitación por habitación matando y también siendo heridos, mientras lo hombres de Enzo estaban en una emboscada en uno de los salones de la plata baja.

Julián quedó de un costado de la columna que estaba siendo destrozada a tiros cuando corre hacia Enzo quien estaba resguardado por la otra columna y cayó con un disparó.

—  Juli! No no no mierda Julián... — Enzo lo sostuvo entre sus brazos mientras el dibu lo cubría.

Juli se mantenía presionando su abdomen y miró a su chico, sus ojos oscuros y esa sonrisa que tenía que podía aflojar las piernas de cualquiera.
Porque eso era Enzo Fernández.

— Tranquilo... Ustedes sigan, yo los cubro.

— No, no te voy a dejar, vámonos de aquí.

— Pero hay que matar a Pacheco, dijiste que fue el quien causó... Todo nuestro sufrimiento — Julián respiraba con dificultad.

Enzo comenzó a llorar y negó.
— No me importa, me importa más salvarte a vos! Te amo Julián Álvarez.

— Y yo a vos.

En un momento dejo de haber disparos y Dybala corrió y se tiró delante de los dos.

— Enzo hay que irnos antes de que lleguen más!

— Revísalo... Por favor, está herido.

Rodrigo, el dibu y otro chico más estaban atentos a las puertas y ventanas. Mientras el de ojos azules levantaba la camiseta de Julián para ver la herida.

— Puedo sacar la bala, no perforó ningún órgano o vena importante.... Pero necesita atención.

Enzo asiente y carga a Julián en brazos mirándolo.
— Lit Killah o Duki matarán a ese bastardo, ahora solo me importas vos. Vámonos.

Juli lo abrazo por el cuello escondiendo su cara y sonrió, se estaban retirando, pero en realidad estaban ganando, El odio que Enzo había acumulado tantos años se fué en el momento en que su novio la persona más importante había salido herida, mando a la mierda toda la venganza y solo quiso protegerlo.