Mi Muñeco Preferido - LITIAGO

3- El Líder de los Dragones

Narra Lit

Había entrado rápidamente al baño junto con Khea. Estaba lleno de chicos y les di una mirada que hizo que se largaran de allí.

- Apura! Que ya no aguanto más...

Khea se apresuró a sacar las bolsitas y me dió una, las puse en mi mano e inale la droga suspirando.
No podía decir con exactitud desde cuándo me drogaba, talvez desde que comenzaron las voces en mi cabeza... Y eso fue a los 12 años.

Vi al papá de Tiago y Duki un domingo, cuando fui por mi amigo para ir a un partido.
La puerta estaba abierta asique solo entré, pense que no había nadie y todos se habían ido al partido, pero escuche unos ruidos raros del living y cuando me acerque ví a Tiago inconciente con un moretón en su frente y su padre arriba suyo abusando de su propio hijo.

Tiago era los segundo que más amaba en mi vida después de mi mamá, verlo así me partió el corazón, enojado fui donde el y lo golpe en la espalda para que lo soltará, pero su padre se levantó y me golpeó en la cabeza repetidas veces con el pie.

- Maldito bastardo! Hijo de puta! Largo niño del demonio!..

Solo tenía 12 años asique cómo pude me levanté y el tomando mi remera me azotó contra la puerta, no podía verlo bien por la sangre que caía de mi frente.

- Le dices a alguien y iré a tu casa y le haré lo mismo a tu mamá... Luego la mataré me has oído?! Ahora vete pequeño bastardo! - abrió la puerta y me tiró.

Solloce con miedo no podía hacer nada por Tiago mi cabeza empezaba a doler.

Vamos a matar al maldito algún día, cuando te vuelvas fuerte.

Mauro miro a todos lados y cerro sus ojos esa voz salía de su cabeza. - Por favor... Diosito cuida de Tiago... Que espere por mi... Hasta que me vuelva grande y fuerte.

Destrozaremos al maldito

Así volví a casa, le invente a mamá que unos chicos trataron de robarme y por eso estaba así, esa noche llore y la abrace, agradecía tenerla porque sin duda ella lo protegía siempre.

Me dió pena porque Duki y Tiago tenían que vivir un infierno con ese hombre que se hacía llamar su papá. Es por eso que días después comencé a ir a la habitación de Tiaguito a cuidar de que ese hombre no entrar y quisiera hacerle cosas.

Cuando tenía 16 años ya era bastante alto, decidí matar al maldito, el papá de Duki y Tiago, pero no pude, descubrí que ya no iba tanto a su casa y que ya no tocaba a Tiago desde hacía bastante. Eso me tranquilizó.

Cuando fui creciendo oía la voz en los peores momentos, me hacía hacer cosas horribles y yo solo deseaba gritar, cuando cumplí 15 y con Duki nos hicimos respetar en el barrio, fue la primera vez que consumi para mantener alejado a la maldita voz.

Pero ahora cuando había momentos que me enfurecían simplemente salía y me decía que hacer.

Aunque no puedo negar que gracias a ella y ganado peleas muy fuertes y buena con tipos de otros barrios que querían meterse con el líder.

Osea yo.

Sabía que mucha gente del barrio pensaban que el grupo de motoqueros eramos simples maleantes que vendían droga y nada más.

Pues no era tan alejado de la realidad.

Nos habíamos hecho de una mala fama gracias a las peleas para proteger el barrio. Malditos desagradecidos.

Y a demás Khea si vendía droga, Bueno Toda la banda se dedica a venderla, pero no en el barrio, esto comenzó a ser así desde que nos dimos cuenta que éramos un grupo fuerte y no íbamos a dejar que los narcos nos usen, asique que mejor que nosotros usarlos a ellos y cobrar bastante por venderla. Además todos necesitábamos dinero.